La gastronomía argentina se ha convertido en un faro en el mundo culinario y constantemente hay pruebas que lo respaldan. Ahora, la reconocida publicación Taste Atlas incluyó a dos pizzas de elaboración nacional entre las más famosas del mundo.
“Hoy en día, existen numerosas variaciones de este querido plato en todo el mundo, desde aquellas con aderezos simples como jamón, prosciutto, cebolla y pimiento morrón, hasta variaciones inusuales como pizza de hot dog o hamburguesa o aderezos exquisitos como trufas blancas, comestibles de oro, langosta y caviar”, introdujeron en el listado de esta plataforma que reúne las opiniones de comensales en todo el planeta.
Las recetas argentinas que están en este informe son la fugazza y la fugazzeta. Sobre la primera, desde Taste Atlas precisaron: “Similar a la focaccia genovesa , la fugazza es uno de los muchos platos tradicionales argentinos que fueron influenciados por la cocina italiana. Está elaborado con masa madre y viene cubierto con una generosa cantidad de cebollas caramelizadas. La corteza de Fugazza suele ser un poco más espesa, pero de sabor neutro”.
“Ocasionalmente se añaden al plato algunos ingredientes típicos mediterráneos, como aceitunas en rodajas, alcachofas y, a menudo, mozzarella y queso parmesano rallado o queso cheddar. Sin embargo, la versión sencilla y tradicional, que incluye cebollas caramelizadas salteadas y orégano, sigue siendo la favorita entre los argentinos. La fugazza se hornea, se corta en forma de triángulo y se sirve caliente”, plantearon los autores.
Con respecto a la fugazzeta, Taste Atlas remarcó: “La fugazzeta es una pizza rellena de mozzarella y cebolla, originaria de Argentina. Las cebollas deben estar cortadas en rodajas finas y pueden estar crudas o salteadas. La masa suele elaborarse con leche, agua, levadura, harina, azúcar, sal y aceite de oliva”.
“Se cree que la fugazzeta evolucionó a partir de la fugazza, una pizza sin relleno cubierta con cebolla, y la propia fugazza evolucionó a partir de la focaccia italiana. Cuando a la fugazzeta se le añaden verduras salteadas como espinacas, se le llama entonces fugazzeta de verdura, y cuando se le añaden lonchas de jamón, se le conoce como fugazzeta con jamón”, plantearon en el listado.
Otros reconocimientos a la gastronomía argentina
No es la primera vez que hay platos argentinos entre los mejores del mundo, de acuerdo a los estrictos criterios de Taste Atlas. Semanas atrás, más precisamente en marzo, la revista ubicó al sándwich de lomo entre los mejores 10 del planeta, específicamente en el puesto 6.
A su vez, como si esto fuera poco, otras tres recetas criollas se posicionaron en este listado, que relevó a las preparaciones entre panes más aclamadas del mundo. Estas son el bondipan, que quedó en el casillero 13; el choripan, en el 18°; y el sándwich de milanesa en el 48° lugar.
Sobre el sándwich de lomo, desde Taste Atlas apuntaron: “Esta es una versión extrema de un sándwich de carne: relleno con lomo en rodajas finas, tomates, cebollas, lechuga, mayonesa, salsa chimichurri, jamón, queso y un huevo frito. El sándwich de lomo o lomito es un sándwich gigante que, de seguro, saciará incluso a los consumidores más hambrientos”.
“Sin embargo, este delicioso sándwich está abierto a la innovación: algunos podrían sustituir el filete por carne de cerdo, o ponerle rodajas de berenjena, junto con cualquier otro ingrediente que se les ocurra. Popular tanto en Argentina como en Uruguay, se puede encontrar fácilmente en numerosos carritos callejeros dispersos por las áreas metropolitanas de ambos países”, agregaron.
Con respecto al bondipan, el informe remarcó: “Bondipan (o bondiola) es un sándwich clásico originario de Argentina. Similar al choripan más famoso, este sándwich está hecho con bondiola de cerdo, paleta de cerdo asada o cocida a la perfección y servida en pan francés crujiente. La suculenta y salada carne de cerdo se rocía con jugo de limón y, a menudo, se cubre con chimichurri. Si se desea, también se puede añadir al sándwich un poco de salsa picante. El sándwich se vende normalmente como comida callejera y la gente suele disfrutarlo mientras está junto a la barra”.
Mientras que el choripan fue reconocido por Taste Atlas como “lo último en comida callejera argentina: un sándwich que consiste en chorizo y una variedad de condimentos en un panecillo crujiente. Se suele consumir sobre la marcha, ya que se vende mayoritariamente en puestos callejeros de toda Latinoamérica. El nombre choripán se deriva de dos palabras: chorizo, que hace referencia a la salchicha, y pan, que significa pan”.
Sobre el clásico sándwich de milanesa, destacaron: “El sánguche de milanesa es un sándwich popular originario de Argentina, aunque también es popular en Uruguay. El sándwich generalmente consiste en una baguette dividida o un panecillo largo relleno con milanesa, mayonesa, tomates, cebollas y lechuga rallada. Los ingredientes adicionales pueden incluir mostaza, chimichurri, jamón o queso. Este sándwich es especialmente popular en la provincia de Tucumán, donde se vende en sangucherías, en su mayoría familiares. En algunos restaurantes el sánguche de milanesa se acompaña con puré de patatas o patatas fritas”.