“El amor es el reino que más sangre ha derramado. Como nosotros lo manejamos en nuestra cultura y sociedad es un problema de salud pública, la gente sufre mucho por amor; habría que crear un ministerio al respecto. El 60% de las consultas psicológicas tienen que ver con el amor y el desamor”, reflexiona Walter Riso, doctor en psicología especializado en terapia cognitiva y escritor, en el ciclo “Aprendemos Juntos 2030″, la plataforma de contenidos inspiradores del BBVA.
Durante la charla el experto, preocupado por esta situación e inquieto por el futuro que depara a las relaciones amorosas, comenta que por amor se han hecho y se hacen barbaridades. Por este motivo se cuestiona qué hacen las parejas que funcionan bien para triunfar. Al respecto brinda las cinco claves principales del éxito.
1) Tener reciprocidad.
Esto permitirá dar y recibir de igual manera, actuar en equipo, en equilibrio y que ninguna de las partes sienta que entrega más que la otra porque esto genera un desbalance que a la larga puede hacer que la relación no prospere. La fórmula correcta sería que “no haya dominancia ni sumisión, es decir, se trata de un ida y vuelta”, menciona Riso. Para el psicólogo, las parejas que funcionan bien son democráticas, horizontales; no hay relación de dominio de uno sobre el otro”.
2) Libertad y humor
“Para que las parejas sean sanas y duraderas no tienen que estar totalmente superpuestas porque en las que prevalecen estas características, no hay asombro, no hay sorpresa, se puede predecir la conducta del otro y me aburro”, indica Riso. Para el especialista, el humor es otra cualidad fundamental en una relación de a dos, un aspecto que considera esencial y que no puede faltar: “Si tienen que explicarle el chiste que hicieron a su pareja, sepárense”.
Y si bien hay cuestiones y momentos que obviamente se comparten entre ambas partes implicadas en la relación, “también es necesario tener un espacio de reserva personal, diseñado totalmente para uno, donde el otro no cabe ni debería meterse”, aclara Riso y explica que una estrategia para darse cuenta si esta premisa se cumple es prestar atención a si hay asombro, sorpresa y humor frente al otro.
3)La sensibilidad y la entrega
Para explicar este eje, el especialista lo grafica de la siguiente manera: “Tu dolor me duele, tu alegría me alegra, pero si tu dolor no me duele y tu alegría no me alegra, no hay ni compasión ni congratulación”, dice. Por compasión se refiere a compartir el dolor, “pero si tu sufrimiento no me llega, entonces ´¿qué estás haciendo conmigo?´, no te merezco; no te merece quien no le duele tu malestar”, define. Según comenta, esta situación se llama “ternura” e implica “no aplastar al otro con mi yo”. Incluso, agrega Riso, “a veces tengo que existir menos para que tú puedas estar”.
4)La admiración
En cuarto lugar enumera a la admiración. “Puede haber admiración sin amor, por ejemplo hacia un profesor, pero no puede haber amor sin admiración”, reflexiona Riso. Este estupor se ve mucho en faenas, cuando las personas están realizando alguna actividad cotidiana o se enfrentan con éxito a momentos complicados en el cual tuvieron que sortear obstáculos. “Durante la pandemia me pasó que me llamaban muchos pacientes para quejarse de sus parejas. Lo que pasó fue que al pasar a estar todo el día juntos en su casa empezaron a ver cosas del otro que jamás habían notado porque quizás eran solo pareja de fin de semana y cuando se juntaban también estaban con los niños, lo que hacía que estuvieran distraídos y no se prestaran atención”, menciona Riso.
5) El respeto
Por último, el psicólogo habla del respeto por el otro y aclara que esto no tiene nada que ver con el miedo ni la veneración. “Si ustedes veneran a su pareja, no tienen una pareja sino un maestro espiritual. Venerar es tirarse a los pies e idealizar al otro a un nivel que me tengo que convertir en discípulo. Y la realidad es que el amor tiene que ser horizontal”, enfatiza Riso.
Para este profesional, el respeto es cuando en una pareja hay admiración y ambas partes tienen la capacidad de reconocer que el otro lo inspira. “Cuando estás con una persona a la cual venerás como a un semi dios, vas a terminar diciendo ´tengo que imitarlo´, copiarlo, ser igual”, explica Riso. Pero, “Si ustedes respetan a su pareja, lo que van a decir es ´me inspira´, entonces lo que hago es crear con mi sello personal. No soy una copia”, añade el psicólogo. Y finaliza: “Respeto es entender que sos un sujeto, no un objeto y que tal como decía Kant, ´sos un fin en sí mismo y esto significa que no te puedo manipular ni explotar´. Como persona tenés algo importante que decir, que vale la pena escuchar”.