Tras dos meses de la asunción del presidente Javier Milei, nueve de cada diez argentinos afirman estar ajustándose y achicando sus gastos, mientras que tres de cada cuatro percibe una sociedad dividida y en conflicto constante, según una encuesta difundida por la consultora Taquión. Asimismo, se monitoreó también el nivel de el “aguante” de los encuestados en relación a las políticas implementadas hasta el momento, a la espera de resultados favorables.
Uno de los principales resultados que arrojó el sondeo realizado por Taquión, del que participaron 1621 individuos mayores de 18 años, consultados del 26 al 30 de enero de 2024, es que si bien un 27% de los argentinos no tienen paciencia con el Gobierno, hay un 46% que está dispuesto a esperar 6 meses o más para ver mejoras.
Por el otro lado, la encuesta también estableció que nueve de cada diez argentinos están ajustando sus gastos y siete de cada diez lo hace estrictamente por necesidad. En otras palabras, el 65% de quienes ajustan lo hacen porque no tiene otra alternativa para subsistir, mientras que el 33,8% lo hace porque se encuentra convencido de que lo que viene es mejor para todos”, distinguieron desde la consultora.
“La idea de que es necesario ajustarse porque lo que viene es mejor para todos prende sobre todo en los más jóvenes”, aclararon desde Taquion, en relación a los consultados pertenecientes a la generación Z, es decir los nacidos entre 1995 y el presente.
Uno de los interrogantes centrales del estudio gira en torno a la “paciencia” de los encuestados”. Puntualmente, se les consultó: “¿Cuánto tiempo están dispuesto a esperar al Gobierno para ver mejoras?”. Un 27% señaló no estar dispuesto a esperar al Gobierno, al tiempo que un 16% de los encuestados indicó su paciencia oscila entre uno y tres meses, mientras que un 16% podría esperar entre seis meses y un año.
“Si bien uno de cada tres declaran no poder esperar, hay un 46% que afirma tener una tolerancia igual o mayor a los seis meses. En diciembre, este número era cercano al 30%”, detallaron desde la consultora.
“Mucho se discute sobre la tolerancia social al plan de gobierno. En ese sentido, aun no se registran signos de hartazgo equivalentes a situaciones similares que los argentinos hayan vivido en el pasado. El Presidente todavía logra eludir o mitigar el impacto del descontento social sobre su figura”, completaron al respecto.
En tanto, el estudio también relevó el nivel de apoyo a la forma de comunicar del Presidente. Sobre esta cuestión, un 45,9% opinó que debería modificarla y comunicar de manera más formal, respetando las instituciones, mientras que un 26,5% indicó que debería mantener su estilo, pero no olvidarse de que ahora es presidente. En tanto, un 23,5% consideró que su forma de transmitir es correcta y que debe mantener su estilo, incluso el cultivado antes de ser Presidente.
“La comunicación del Presidente se mira desde la polarización. Casi 50% rechaza sus formas. El otro 50% la evalúa favorablemente, aunque algunos le piden no olvidarse de que ahora es presidente”, resumieron.
Por otro lado, del sondeo también se desprende que un 41,6% identifica al peronismo y a partidos afines “como grupos que ponen palos en la rueda” del Gobierno, y un 39,5% apunta contra el sindicalismo y los gremios. Por detrás, un 34,7% señala a los movimientos sociales y a la izquierda, y en menor medida un 15,5% menciona a los gobernadores y a legisladores.
Por último, se le preguntó a los consultados a quiénes identificaban como líderes de la oposición y más de un 30% respondió que a “nadie”. En tanto, un 16,1% posicionó al gobernador de la provincia de Buenos Aires en el podio del ranking, seguido por Cristina Kirchner (11,9%) y por el exsecretario de Comercio, Guillermo Moreno (4,2%).
