La suerte del Campeón
Justo cuando el gobierno atraviesa las primeras turbulencias, la CGT convoca a un paro y saca el tren fantasma a la calle. Todo ganancia para Milei. - Por Alejandro Borensztein
Antes que nada, vaya una aclaración para todos los que andan indignadísimos por la designación como Secretario de Culto de Francisco Sánchez, un muchacho que se hizo famoso por definir a los musulmanes como “una horda islámica”, a Francisco como el Papa que hizo más daño (de esta ya se disculpó) y a los judíos como sionistas que buscan dominar el mundo y todas esas cosas que suelen decir los antisemitas.
En otras palabras, un candidato perfecto para el cargo de Secretario de Culto. Como si estos méritos no alcanzaran, en agosto de 2022 el tipo tuiteó reclamando la pena de muerte para Cristina. Lindo elemento, diría mi tía Ester.
Antes de indignarse por lo de Sánchez, la gente enojada debería reflexionar lo siguiente: considerando que en los últimos meses han brotado antisemitas por todos lados y que en la Argentina, como en tantos otros países, hay una numerosa colonia de estúpidos, no está mal que haya alguien en el Poder Ejecutivo que los represente. Bien ahí Javi con el nombramiento.
Del mismo modo, también aparecieron esta semana otros indignados, en este caso por el hecho de que entre 2019 y 2023 Cristina se fue 59 veces a El Calafate a rascarse el higo en aviones YPF dejando un muerto de 843.675 dólares, o sea unos 1.000 millones de pesos. Parece mucho pero, en realidad, no es para indignarse tanto. Comparado con los 16.000 palos verdes de multa que nos enchufaron por los errores de Ella, Kicillof y Zannini en la estatización de YPF, lo del jet de la petrolera es una monedita.
Moraleja: hay que saber elegir bien las cosas por las cuales indignarse. Si no, no vamos a dar abasto.
En todo caso, más que reclamarle el tema de los vuelos, deberíamos pedirle a Ella, a Axel, a Zannini y, por qué no también a los Eskenazi, que le expliquen al pueblo argentino el chiste de la multa así nos reímos todos.
Dicho esto, vayamos a lo importante. O para decirlo mejor, a lo único importante: The Lion Javi.
Más allá de todo lo que se dice, de lo que sospechamos y de lo que vemos, el presidente Milei sigue conservando un inmenso crédito porque tiene a favor algo muy importante: sus antecesores.
Desde Alberto para atrás, tuvimos una verdadera colección de genios que terminaron siendo la alfombra roja del León.
No vale la pena volver a recorrer los logros de los 20 años de kirchnerismo. Solo sintetizarlos en el simple hecho de que recibieron el dólar a 3 pesitos y lo acaban de entregar a 1.000 mangos y en subida. Por no hablar de la yerba, el asado, la pobreza, Lázaro o Maduro.
Tampoco podemos olvidar que cuando tuvieron su oportunidad, los genios de Cambiemos la desperdiciaron bailando y soltando globos, hasta lograr que vuelva Cristina. Por eso, en cualquier comparativa, a Milei le sobran millas para gastar.
A pesar de esto, hay gente indignada (en la Argentina tenemos indignados por todos lados) diciendo que Milei no entiende nada, que es un improvisado y una bestia peluda. Vamos muchachos, con una mano en el corazón: después de 20 años de Cristina, Máximo, Hugo y Pablo Moyano, Baradel, Aníbal, Massa, Capitanich, Insfrán, Tailhade, etc. ¿Quien pensaban que venía? ¿John Fitzgerald Kennedy?
El gran capital de Javi es el 56% y el pasado. Sin embargo, con todo esto que tiene a favor, hay algo muy complicado que tiene en contra: no hay margen para el error.
Si no baja la inflación y estabiliza en un plazo prudencial, las cosas se le pueden complicar. Por eso es tan importante cuidar que Javi haga las cosas bien y, en todo caso, cuando haga algo mal o no lo sepa hacer, se lo enseñemos. Por ejemplo, hablar en Davos.
Que el presidente del país que más fracasó en el mundo en los últimos 20 años se pare frente a los tipos más exitosos del planeta para decirles que el socialismo los acecha, no parece la mejor manera de conseguir inversiones.
Mezclar al nazismo y al fascismo con la socialdemocracia es mezclar a Hitler o Mussolini con Merkel. Unos destruyeron Europa y la otra generó el mayor bienestar de la historia alemana. Se supone que el presidente debería saber esto de memoria.
Felipe González en España, Shimon Peres en Israel, Tony Blair en el Reino Unido y Mitterrand en Francia, por dar algunos ejemplos, fueron dirigentes socialistas o laboristas que llevaron a sus respectivos países a niveles de prosperidad y desarrollo capitalista como nunca habían tenido antes. Obama y Clinton fueron presidentes socialdemócratas con los que EE.UU. tuvo logros económicos sin precedentes.
En otras palabras, si Javi quiere conservar su crédito debería evitar meterse en temas que no maneja demasiado y, sobre todo, que no le importan a nadie. El comunismo ya no es un problema en este mundo. Hasta los chinos dejaron de ser comunistas. Solo queda Rodríguez Larreta.
El socialismo tampoco es lo que dice Milei, y el aborto, el feminismo y el ambientalismo no eran temas para debatir en Davos. Si no tiene un asesor de confianza que le explique estos conceptos básicos, ya es momento de ir buscándole uno.
Además del 56% y el pasado, parecería que el presidente también cuenta con la suerte. Este miércoles 24, o sea tan solo cuarenta y cinco días después de haber asumido, la CGT y el peronismo le van a clavar el primer paro general que seguramente será con tutti teniendo en cuenta que llevan cuatro años de abstinencia con el upite cerrado y ya no aguantan más. Excelente noticia para el gobierno: decenas de sindicalistas rebosantes de imagen negativa ganando las calles y sumándole votos a Javi. Por si esto no alcanzara, adhirieron al paro Máximo y La Cámpora.
Párrafo al margen sobre Máximo: que se pliegue a la huelga un tipo que nunca laburó es algo maravilloso que solo puede pasar en la Argentina. ¿Ven? Eso era lindo para que Javi cuente en Davos en lugar de las cositas que anduvo diciendo.
Además de la huelga y de la marcha del tren fantasma, el gobierno va a tener otra novedad que le suma: el gobernador de La Rioja se patinó toda la guita, razón por la cual va a emitir una cuasi moneda provincial, como en la crisis del 2001. La nueva moneda se va a llamar BOCADE (hay que reconocer que, a la hora de ponerle nombre a las cosas, los peronistas son geniales). En realidad, teniendo en cuenta que el gobernador se llama Quintela y que va a imprimir papel pintado, esa moneda debería llamarse Quintela Martín (cuac).
En fin, como ve amigo lector, si bien esto recién empieza, es obvio que no va a ser fácil y que a Javi habrá que ir llevándolo. Y cuidándolo para que no haga macanas.
Nadie votó a Milei para que le enseñe al mundo su modelo anarcocapitalista. Con que aplaste la inflación y estabilice la economía, alcanza y sobra para ser Gardel. Nada que no hayan logrado todos los países vecinos. Lo importante es que no pierda el foco.
Uno que ha visto pasar tantos Benegas Lynch por la política argentina, de esos que arreglan el país desde la platea del Campo de Polo con saco de lino blanco, barba candado y mocasines de Guido, ya sabe que por ahí va a venir el error.
Esa es la puerta de entrada por donde podría volver Cristina y detrás de Ella, Maduro, Irán y Putin que son hoy el verdadero problema. Lo demás es papel pintado. Quintela Martín.