La inteligencia artificial reveló cómo sería el ser humano dentro de mil años
Le preguntaron a la inteligencia artificial de Google sobre un posible futuro de la sociedad y su respuesta abrió la posibilidad de un cambio rotundo.
En un ejercicio de exploración hacia el futuro, la inteligencia artificial se convierte en el aliado para aquellos que buscan respuestas sobre cómo podría ser el destino de la humanidad en los próximos siglos. Una de las plataformas consultadas con mayor frecuencia para este propósito es Google Bard, que ofrece un vistazo a lo que podría ser la apariencia del ser humano dentro de unos mil años.
Cómo sería el humando dentro de mil años
Antes, la visión del futuro estaba limitada a la imaginación alimentada por la pantalla de cine o televisión, donde películas y series proyectaban visiones de la sociedad y del ser humano en el año 2350 y más allá. Sin embargo, la llegada de plataformas de inteligencia artificial como ChatGPT y Bard ha abierto nuevas posibilidades al permitir una exploración más cercana y personalizada de lo que podría ser la evolución del ser humano en el año 3024.
La inteligencia artificial de Google reveló cómo podrían ser los humanos dentro de mil años.
Al consultar a Google Bard sobre cómo será el aspecto del ser humano en mil años, la inteligencia artificial de Google sugiere que los humanos del futuro estarán más adaptados a su entorno, especialmente considerando la posibilidad de colonizar otros planetas.
Este ajuste podría manifestarse en una piel más gruesa y pulmones más fuertes, reflejando una adaptación evolutiva para enfrentar condiciones ambientales diversas y desafiantes.
Con los avances continuos en tecnología e ingeniería genética, la proyección de Bard plantea la posibilidad de que los humanos futuros no solo se adapten, sino que también diseñen sus propias formas y capacidades. Este escenario sugiere la creación de una nueva especie humana, con características y habilidades distintas de las que conocemos en la actualidad.
La inteligencia artificial señala la posibilidad de adaptarnos a otros planetas.
La evolución es un proceso lento, pero puede producir cambios significativos con el tiempo. Los factores que podrían influir en la evolución de los humanos en los próximos mil años incluyen:
Cambios ambientales: El cambio climático, la contaminación y otros factores ambientales podrían provocar cambios en la fisiología y la anatomía humana. Por ejemplo, las personas podrían necesitar tener piel más oscura para protegerse de los rayos UV más intensos o pulmones más grandes para respirar el aire más contaminado.
Tecnología: La tecnología podría permitir a los humanos mejorar su salud, su longevidad y sus capacidades físicas. Por ejemplo, las personas podrían someterse a cirugías genéticas para corregir defectos congénitos o aumentar su fuerza y resistencia.
Estilos de vida: Los cambios en los estilos de vida, como la dieta, la actividad física y la exposición a enfermedades, también podrían influir en la evolución humana. Por ejemplo, las personas que comen una dieta saludable y son físicamente activas podrían tener una mayor probabilidad de sobrevivir y reproducirse, lo que podría conducir a cambios en la composición genética de la población.