Javier Milei visita hoy la Casa Blanca y partirá enseguida de regreso a Buenos Aires: qué dijo sobre el viaje
Se reunirá con Jake Sullivan, asesor clave de Biden, y regresa inmediatamente a la Argentina. Luis Caputo y Nicolás Posse irán al FMI y al Tesoro.
El presidente electo Javier Milei mantendrá este martes una única reunión en Washington porque solo visitará la Casa Blanca para reunirse con el asesor de Seguridad Nacional Jake Sullivan, un funcionario clave de Joe Biden. El líder libertario partirá enseguida de regreso a Buenos Aires y no irá al Fondo Monetario Internacional ni al Tesoro, donde asistirán miembros de su equipo.
La agenda, que fue comunicada anoche a Clarín desde la delegación de Milei, sorprendió por lo breve ya que se esperaba que el presidente electo concretara buena parte de la “ronda habitual” de los políticos argentinos en la capital estadounidense, que incluye Casa Blanca, Departamento de Estado, Departamento del Tesoro, FMI y otros organismos internacionales.
Se destacó desde la comitiva que en este caso las reuniones eran solo “protocolares” y que Milei debía regresar pronto a Buenos Aires para continuar con el armado de su gobierno.
Milei llegó cerca de las 9 de la noche al hotel Hay-Adams de Washington, frente a la Casa Blanca, con su buzo azul y clásica campera negra, y un porta-trajes en la mano donde llevaba su atuendo más formal para este martes.
En el lobby del hotel, donde solía alojarse el ex presidente Mauricio Macri, se lo veía cansado, luego de haber viajado toda la noche y aterrizado a las 4 de la mañana en Nueva York, donde el lunes tuvo una jornada espiritual y política: desayunó con líderes de la comunidad judía neoyorquina, luego visitó la tumba del “rebe” de Lubavitch en Queens y más tarde se reunió en el hotel Plaza de Manhattan con el ex presidente Bill Clinton y el enviado de Biden para América latina, Christopher Dodd.
La comitiva de Milei incluye a su hermana Karina, el asesor Santiago Caputo, el futuro jefe de Gabinete Nicolás Posse, el empresario Gerardo Werthein (posible embajador en Washington), el embajador de EE.UU. en Buenos Aires Marc Stanley y Luis “Toto” Caputo, que no ha sido confirmado como ministro de Economía, pero se mueve aquí como tal.
“Tuvimos un excelente almuerzo con Chris Dodd y Bill Clinton en el que expresamos nuestra visión para Argentina y los cambios que hacen falta. Ambos se mostraron muy alineados con nuestras ideas”, dijo Milei a los periodistas. que lo esperaban. “Mañana (por hoy) tenemos una reunión en la Casa Blanca con Jake Sullivan en la que le vamos a expresar nuestra posición y las medidas que vamos a implementar a partir del 10 de diciembre”, agregó.
La reunión será a las 1 de la tarde, hora local, las 15 de Argentina. Milei no verá a Biden, que viajará a Atlanta para asistir al funeral de Rosalynn Carter, pero igualmente no es habitual que el presidente de EE.UU. reciba a un mandatario electo.
Sin embargo, la reunión con Sullivan es un gesto importante para Milei porque es un hombre clave en el gobierno de Biden que está hoy inmerso en temas urgentes como la crisis en Oriente Medio. En esa reunión participarán Juan González, el asesor para América latina de la Casa Banca y también miembros del Departamento de Estado. Se estima que irá casi toda la comitiva de Milei, incluido el embajador Stanley que ayudó a la organización de la visita.
"Queremos ver cuáles son las ideas de Milei, dónde quiere ir con sus políticas y tener los canales de comunicación abiertos", dijo el lunes el portavoz de la Casa Blanca, John Kirby. El libertario es desconocido en Washington, donde muchos lo describen como un “mini Trump” y ven con desconfianza su cercanía con el magnate, acusado de violar las instituciones democráticas, y algunas de sus políticas como la dolarización, la eliminación del Banco Central y la negación del cambio climático.
El almuerzo previo con Clinton y Dodd, dos demócratas de peso y amigos de Biden, servirá para afianzar la visión de la Casa Blanca sobre Milei.
Una vez terminada la reunión, el presidente electo partirá de regreso a la Argentina con Karina y Santiago Caputo en el avión privado que los trajo a todos a Estados Unidos. Pero otra parte de la delegación se queda: Luis “Toto” Caputo irá por la tarde al Tesoro y al Fondo Monetario Internacional junto con Nicolás Posse.
Desde la delegación minimizan que Milei no asista a esos encuentros a los que califican “protocolares” y señalan que con Kristalina Georgieva ya se comunicó el viernes vía Zoom, aunque desde el FMI nunca confirmaron que la directora fuera a recibir al libertario en persona.
Caputo y Posse irán al Fondo y seguramente verán a Rodrigo Valdés, director del Hemisferio Occidental, y a Luis Cubeddu, que sigue al detalle el caso argentino. Es posible que también se reúnan con Gita Gopinath, la número dos del organismo.
Caputo conoce bien los pasillos del Fondo, que transitó cuando era ministro de Economía de Macri y negociaba el préstamo millonario que se le concedió a la Argentina. Pero entonces eran tiempos de Christine Lagarde, Alejandro Werner y Roberto Cardarelli, hoy fuera del Fondo. Caputo hoy tiene que retomar el diálogo con los nuevos protagonistas y pedir replantear el programa ante los próximos vencimientos.
Desde las filas de Milei señalaron oficialmente que las reuniones serán para explicar el plan económico, que implica ajuste fiscal, reforma financiera, reforma del estado y desregulación. “No es en búsqueda de financiamiento”, aclaran. De hecho, había trascendido que en Nueva York Caputo se había reunido con inversionistas, pero él lo negó.
Luego irán al Tesoro, donde posiblemente sean recibidos por Michael Kaplan, secretario adjunto para el Hemisferio Occidental y por Jay Shambaugh, secretario adjunto para Asuntos Internacionales. Ambos querrán saber en detalle los programas de Milei y los argentinos deberán intentar recuperar la confianza del Tesoro, que en los últimos meses viene debilitada con nuestro país.
De hecho, Shambaugh dijo en un discurso en septiembre que el Fondo “debe estar dispuesto a retirarse si un país no toma las medidas necesarias” para ser eficaz, lo que se entendió como un mensaje hacia Argentina.
Pero Caputo planteará tanto al FMI como al Tesoro un ajuste más drástico aún de lo que el organismo había pedido en primera instancia, sumado a reformas estructurales que hace tiempo el Fondo reclama. Y esta visión será bien recibida en ambos ámbitos.