Tras el fallo de Casación quedó firme el pedido de detención ordenado por el juez Federico Guillermo Atencio, a cargo de la causa de “Chocolate” Rigau, contra el puntero del PJ que había sido descubierto sacando plata de un cajero automático con 48 tarjetas de débito de “empleados fantasma” de la Legislatura bonaerense. Este sábado, se entregó en la comisaría 2° de La Plata y se puso a disposición del juez.
"Tomé conocimiento en la fecha a través de mis defensores respecto de la orden de detención que pesa en mi contra, y de la denegatoria de eximición de prisión del a los fines de estar a derecho me presento espontáneamente”, dice un escrito que presentó el puntero peronista en el que además, pidió su eximición de prisión.
En ese destacamento estuvo detenido durante once días. Fue desde que lo encontraron en el cajero con las tarjetas hasta que resolvieron excarcelarlo.
La Cámara había ordenado el jueves mantener abierta la investigación contra Rigau, quien horas antes, en una maniobra desesperada, había pedido a través de sus abogados que se frenara la pericia a su teléfono celular.
Tres días antes del fallo de la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal de La Plata que tackleó la investigación y le devolvió la libertad al único imputado, los defensores de Chocolate Rigau habían puesto el grito en el cielo. En un escrito fechado el 18 de septiembre, los penalistas Alfredo Gascón y Miguel Ángel Molina le pidieron al juez de la causa, Federico Guillermo Atencio, que postergara “cualquier decisión” sobre el teléfono. Para ellos, el secuestro del celular es “insólito”.
En la misma línea del habeas corpus que Gascón y Molina llevaron directamente a la Cámara, plantearon en el escrito al juez de Garantías que hubo una “ilegal pesquisa y secuestro del celular de Rigau”. Sostuvieron que “insólitamente, se le secuestró el teléfono celular” a Chocolate y que abrirlo sería arbitrario, e iría contra su “libertad de intimidad”.
El jueves 5, solicitaron nuevamente que se suspenda la apertura del teléfono y que no se lleve adelante ninguna de las medidas de prueba solicitadas por la fiscal Lacki. Los defensores pidieron que le devuelvan el aparato al acusado junto con la plata y las tarjetas.
Además, Lacki citó a declarar a varios de los empleados cuyas cuentas administraba Rigau. Y ordenó más medidas. Entre ellas, al Banco Provincia le pide registros de cámaras de seguridad del cajero de 7 y 54, de La Plata, de los días 5 al 8 de septiembre. Pero también de julio y agosto.
En tanto, a la Cámara de Diputados, la fiscal le pide que informe “a qué se refiere” cuando en los legajos de personal figura “Bloque político”. Y que especifique en qué áreas en las que prestan servicios cada uno de los mencionados (asiento físico), que indique superior jerárquico, régimen laboral que los rige (indicando días y horarios), y que entregue una copia del contrato y/o acto de designación de los empleados cuyas cuentas vaciaba Chocolate Rigau.
El juez Atencio, al denegarle la excarcelación a Rigau, había planteado que el avance de esta investigación podría develar “un acto de corrupción de inmensurable trascendencia”. Y que el circuito en estudio “no pudo escapar –cuando menos– del conocimiento” de la presidencia de la Cámara de Diputados, el empleador plasmado en las 48 tarjetas de débito que conservan los investigadores.