El arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, monseñor Jorge Ignacio García Cuerva, dijo este domingo que "es tiempo de unirnos", al presidir la tradicional misa de la Peregrinación a la Basílica de Luján. Y en la recta final de la campaña rumbo a las elecciones del 22 de octubre, lanzó duras críticas por la inflación y el avance del narcotráfico.
Ante cientos de miles de personas que se movilizaron desde ayer en la 49° Peregrinación Juvenil a Luján, García Cuerva dijo: "María de Luján, estamos en tus manos porque estamos desesperanzados y tristes, necesitamos recuperar la alegría y la esperanza".
En su homilía, García Cuerva aludió a "los rostros concretos de más de 18 millones de hermanos que representan el 40 de pobreza, los 9 millones de argentinos que viven en la indigencia, los enfermos, ancianos que están solos, adolescentes y jóvenes quebrados por la droga, por su futuro hipotecado".
"La inflación es el impuesto de los pobres", señaló, y agregó que la Virgen María "nos sostiene en tiempos de crisis económica".
En una homilía en la que mencionó la campaña electoral, García Cuerva dijo que las manos de la Virgen María "son de barro porque están bien metidas en la realidad de nuestra gente".
"En ellas confiamos -continuó- en estos tiempos en que se nos acercan manos llenas de promesas con sabor preelectoral".
Con el lema "Madre, estamos en tus manos, danos fuerza para unirnos", la Peregrinación Juvenil partió ayer a las 10 desde el santuario de San Cayetano de Liniers, en la ciudad de Buenos Aires, hacia la Basílica de Luján, en la provincia de Buenos Aires, en una caminata de más de 60 kilómetros que contó con un operativo especial de apoyo.
García Cuerva se dirige a los fieles antes de comenzar la tradicional peregrinación. (Matías Campaya)
Este año la peregrinación contó con la presencia de García Cuerva, quien caminó junto a los fieles todo el trayecto hasta Luján, en un hecho inédito ya que nunca antes un arzobispo porteño había hecho a pie ese recorrido.