Las entrevistas dieron comienzo el jueves con la invitación cursada al precandidato de Juntos por el Cambio, sector bullrichista que integran el Pro y la Coalición Cívica, Alberto Fernández, quien llegó acompañado de otros candidatos de la lista y de referentes de distintas actividades que pueden ser posibles funcionarios de su gabinete.
Luego de que Fernández realizase una introducción planteando sus ideas fuerza para conducir la administración municipal, enumerando sus planteamientos éticos y de forma de vida que prioriza, donde dejó muy claros sus principios alejados del amiguismo, el gasto improductivo y la importancia que le otorga al desarrollo de la comunidad, los comerciantes, encabezados por la presidente de la entidad, Milagros Maneiro, comenzaron a plantear distintos inconvenientes que padecen para desarrollar sus actividades, entre las cuales, se destacan aquellas de carácter nacional y provincial que un intendente no puedo solucionar desde su cargo. Sin embargo, se logró el compromiso de Fernández de actuar para que esos reclamos lleguen a las altas esferas por medio de su accionar como intendente, gestionando y haciendo conocer en los distintos estamentos institucionales esas necesidades imperiosas del sector.
Quedó claro que la presión impositiva, la clandestinidad, la competencia desleal y los problemas burocráticos son grandes palos en la rueda para la actividad. Fernández planteó que muchas tasas no tienen contraprestación, siendo una cuestión que se comprometió a revertir. “Sé que estamos mal, pero estoy convencido que se puede”, definió a la hora de definir expectativas sobre el futuro, destacando fuertemente que “no debemos confundir crecimiento con desarrollo”, indicando que los cementerios también crecen pero no le dan trabajo a nadie.
Precisamente la cuestión laboral acaparó una buena parte de la reunión, y al respecto Fernández fue clarísimo al indicar que su gestión estará fuertemente inclinada al sector productivo, brindando servicios y un lugar adecuado a las nuevas industrias y apoyo absoluto a la eliminación de trabas que dificulten la instalación de nuevas pymes y pequeños talleres productivos.
Como tema puntual quedó el convencimiento del precandidato de revisar y eventualmente bajar o eliminar tasas ficticias transformadas en impuestos, como la Tasa de Construcción y la de Seguridad e Higiene. Fernández reconoció el empuje y la creatividad de comerciantes y productores suarenses, un hecho que distingue el distrito de otros distritos vecinos y aseguró que si a esa capacidad se le agrega el apoyo oficial, el desarrollo de Coronel Suarez está asegurado.
Por otro lado informó su absoluta convicción de la necesidad de impulsar y promover los microcréditos productivos, constituyendo un fondo rotativo que hará una cadena de pequeños préstamos que junto al crecimiento de las economía nacional y local ayudará a los pequeños empresarios a mejorar sus productos e incrementar la incorporación de nuevos trabajadores gracias al aumento de la demanda, comenzando la solución del problema del empleo en el distrito.
Ya sobre el final, Fernández reiteró una sentencia que dejó al comienzo. “Sepan que no voy a cambiar favores, sepan que no tengo ni quiero compromisos políticos”, asegurando que en el caso de ser elegido, apenas asuma producirá el irrestricto congelamiento de vacantes en la planta estable del municipio, a excepción de cargos y lugares trascendentes que no puedan ser reemplazados con el personal existente. Del mismo modo, no dudó al admitir que el municipio puede funcionar viene con menos funcionarios políticos que en la actualidad.
Luego de dos horas de reunión, la misma finalizó y los empresarios y productores lograron conocer claramente las ideas y modos de actuar y vivir de Alberto Fernández. De aquí en más quedará comparar estas ideas con los de los otros precandidatos y elegir en que Coronel Suárez desean trabajar crecer, desarrollarse y vivir.
