Con un nuevo integrante en su familia, y en declaraciones con LA NACION, el protagonista de esta historia aportó más detalles del hecho. “Fue todo muy raro lo del encuentro, ya que parecía que tenía que darse así. En la zona en la que viajaba, que va desde Inriville a Marcos Juárez, hay mucha fauna. Por ese motivo, uno presta atención en las banquinas. De curiosos hemos cruzado pumas y otros animales que no son cotidianos de ver”, introdujo.
Sobre el instante en el que se percató de que había algo extraño en el suelo, recordó: “Íbamos viajando y en la banquina vi un bulto negro, pero continué camino. A la vuelta frené para ver de qué animal se trataba y siempre pensé que estaba muerto. Primero me di cuenta de que no estaba en el mismo lugar que lo habíamos visto a la ida, estaba a poco más de un metro y se veía por el contraste con el pasto. Cuando me arrimé vi que era un cachorro. Me quedé impactado en ese sentido, encima es una ruta donde hay zorros, pumas, chimangos… Parecía rarísimo porque no había una casa o un campo”.
Por otro lado, hizo hincapié en las deplorables condiciones en las que estaba el animal: “En el video que compartí se ve cómo tenía los ojos cerrados, de recién nacido. Estaba con un principio de hipotermia, además de que estaba deshidratado. Luego de rescatarlo lo llevamos a la veterinaria y lo internaron. Poco después terminé de trabajar en otro lugar y viajé a donde lo dejé. Me dijeron que estaba mejor y me lo traje a casa con unos medicamentos. Por suerte se recuperó y está más que bien, ya abrió los ojos; el veterinario dijo que tiene entre 7 y 10 días”.
Respecto de lo que piensa sobre la actitud de quienes abandonaron al cachorro, fue contundente. “Hay que tratar de seguir con castraciones para que no pasen estas cosas, pero que existan personas que tiren a un animal, conscientes de que se van a morir y que después puedan dormir tranquilas, no me entra en la cabeza. Si vos lo llevás a un lugar te los reciben, no entiendo por qué hicieron eso. También me preguntaron si había más, revisé porque era raro que había solo un cachorro, pero no, revisamos por las banquinas y no encontramos. Busqué un poco más y nada, así que aparentemente estaba él solo. Ahora por suerte tenemos otra mascota en casa”.
Respecto de la repercusión que obtuvo en la plataforma virtual por el video que publicó, el cual fue visto por más de 3 millones de usuarios, aseguró que aún se encuentra sorprendido al respecto. “Subimos el video a las redes sociales redes para concientizar. Queremos y cuidamos mucho a los animales… nunca nos imaginamos tantas reacciones. Me habló gente de otros países diciéndome: ‘Qué bueno, ¿cómo está?’. Y día a día me piden videos de él”, apuntó.
Finalmente, y tras pensarlo por unos días, Mauro reveló que el perro se llamará Moll. De esta manera, un rescatado más formará parte de su vida. “Por suerte él está bien y la mala ya la pasó, es muy cariñoso, lo queremos mucho”, concluyó. Con este escenario, su cuenta de TikTok ahora se convirtió en un blog donde día a día sus seguidores esperan novedades sobre el cachorro y se enternecen cada vez que reaparece en una publicación.