El lado oculto de la Luna: ¿hogar de antiguos volcanes similares a los de la Tierra?

Científicos del Instituto de Ciencias Planetarias detectaron que estos ahora cráteres alguna vez estuvieron activos. Qué dice el estudio publicado en Nature y por qué esta gran fuente de calor, previamente desconocida, alteraría la comprensión actual de la geología lunar
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Los especialistas ya sabían que la Luna tuvo volcanes activos en el pasado, ya que las regiones oscuras son antiguos flujos de lava que los científicos llaman mar lunar. Pero esos estanques antiguos eran delgados flujos de lava. Ahora investigadores del Instituto de Ciencias Planetarias (PSI), de Tucson (Arizona), en Estados Unidos, anunciaron la detección de otro tipo de volcanes lunares que alguna vez estuvieron activos.

Según señalaron, encontraron una gran fuente de calor previamente desconocida debajo de la superficie en el lado oculto de la Luna. Esta estructura tiene la forma de una gran masa de granito que tiene restos de radiactividad de un volcán anteriormente activo y es el más similar a los volcanes terrestres encontrados hasta el momento.

Esta estructura fue localizada mediante el uso de datos de dos orbitadores lunares chinos, Chang’E 1 y Chang’E 2, según publicaron en la revista Nature. Ambos dispositivos llevan un instrumento para observar la Luna en longitudes de microondas, más largas que el rayo infrarrojo; siendo que usaron este instrumento para mapear la temperatura debajo de la superficie lunar.

Con eso en mente, los investigadores habían sospechado que podría haber volcanes antiguos debajo de su superficie, en un lugar llamado Compton-Belkovich, ubicado en el otro lado de la Luna. Y las sospechas fueron precisas. Encontraron una gran fuente de calor en las profundidades del suelo donde se encontraban los presuntos volcanes.

El autor principal, Matthew Siegler, del Instituto de Ciencias Planetarias, indicó: “Usando un instrumento que analiza las longitudes de onda de microondas, más largas que las infrarrojas, enviadas a la Luna en los orbitadores chinos Chang’E 1 y 2, hemos podido mapear las temperaturas debajo de la superficie. Lo que encontramos fue que uno de estos presuntos volcanes, conocido como Compton-Belkovich, brillaba absolutamente en longitudes de onda de microondas. Lo que esto significa es que está caliente, no necesariamente en la superficie, como se vería en el infrarrojo, sino debajo de ella. La única forma de explicar esto es por el calor adicional que proviene de algún lugar dentro de la corteza lunar más profunda”.

 

Compton-Belkovich: una gran fuente de calor escondido

En ese sentido, Siegler señaló que “estos datos mostraron un gradiente geotérmico alto que coincidía exactamente con una gran superficie rica en silicio de 20 km de ancho que se cree que es una caldera volcánica extinta, que se encuentra entre los cráteres Compton y Belkovich en el lado oculto de la Luna. Esto es alrededor de 10 grados Celsius más cálido que su entorno. Interpretamos este flujo de calor como resultado de un cuerpo de granito rico en radiogénico debajo de la caldera”.

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Además, los científicos dijeron que el calor proviene de una gran masa de granito bajo tierra, la cual está formada por lava que nunca salió a la superficie. En ese tono, Siegler afirmó: “Hemos descubierto calor adicional que sale del suelo en un lugar de la Luna que se cree que es un volcán muerto hace mucho tiempo, que entró en erupción por última vez hace más de 3.500 millones de años”.

En palabras del experto, esta zona “tiene alrededor de 50 km de ancho, y la única solución que se nos ocurre que produce tanto calor es un gran cuerpo de granito, una roca que se forma cuando se enfría un cuerpo de magma, la lava sin erupcionar, debajo de un volcán. El granito tiene altas concentraciones de elementos radiactivos como el uranio y el torio en comparación con otras rocas de la corteza lunar, lo que provoca el calentamiento que podemos sentir en la superficie lunar”.

En resumidas cuentas, según explicaron, el calor no proviene de la lava que todavía fluye bajo tierra, sino que se trata de elementos radiactivos en la roca, ahora sólida, que solía ser lava. Incluso, los investigadores dicen que el único tipo de roca que podría contener suficiente de esos elementos es el granito. Esto indica que un gran volcán anterior una vez fue alimentado por una cámara de magma de granito aún más grande debajo de él. Eso es mucho más similar a los volcanes en la Tierra que lo que se había encontrado previamente en la Luna.

Esta formación de granito se llama batolito granítico. En la Tierra, se pueden encontrar debajo de cadenas volcánicas, como la Cordillera de los Andes o la de las Cascadas. Es por eso que este descubrimiento resultó inesperado. Hasta ahora, solo se han encontrado pequeños granos de material granítico en la Luna, en muestras traídas por las misiones Apolo.

El batolito es un tipo de roca volcánica que se forma cuando la lava sube a la corteza terrestre pero no sale a la superficie, es por este motivo que para los expertos este nuevo hallazgo de una gran masa de granito en la Luna es increíblemente interesante. Existen toneladas de granito de diferentes tipos por toda la Tierra. Pero geológicamente hablando, es bastante difícil hacer granito sin agua y placas tectónicas, razón por la cual realmente no se ve ese tipo de roca en otros planetas. Entonces, “este hallazgo es de gran importancia para la forma en que pensamos sobre el funcionamiento interno de otros cuerpos rocosos en el sistema solar”, indicó Siegler, quien lideró el equipo integrado por Jianqing Feng, Katelyn Lehman-Franco, Jeffery C. Andrews-Hanna, Rita C. Economos, Michael St. Clair, Chase Million, James W. Head, Timothy D. Glotch y Mackenzie N. White.

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