Hay una mansión en Nyack, Nueva York, de 429 metros cuadrados que se destaca por muchas cosas. Fue construida a finales del siglo XIX, tiene vistas del río, cuenta con cinco habitaciones y es la casa actual del rapero Matisyahu. Además, es una de las pocas propiedades en Estados Unidos que ha sido declarada legalmente embrujada por un tribunal.
Los rumores sobre el aspecto sobrenatural de la mansión se remontan a los años 60. En aquel entonces, una mujer llamada Helen Ackley se mudó ahí con su familia y empezó a decir que vivían espíritus de la Guerra de la Independencia en su casa.
Según Ackley, los espíritus agitaban las camas y paseaban por la casa. No obstante, el hecho de que había fantasmas en la mansión no significaba que Ackley y su familia la pasaban mal.
Fantasmas por toda la casa
En 1990, Ackley le dijo al New York Times que uno de los espíritus la observaba mientras pintaba el techo del salón. Fue una de varias entrevistas que dio la propietaria sobre la casa a lo largo de los años.
“Yo estaba en una escalera de casi dos metros y medio. Le pregunté si aprobaba de lo que le estábamos haciendo a la casa, si le gustaban los colores”, afirmó Ackley. “Él sonrió y asintió con la cabeza”.
Al final, toda la publicidad que Ackley le dio a la casa terminaría perjudicándola. Tras vivir en la casa durante 20 años, Ackley decidió venderla en 1989. Sin embargo, no le dijo a Jeffrey M. Stambovsky, el hombre al que se la vendió, que la casa tenía una reputación por supuestamente estar embrujada.
Cuando Stambovsky lo descubrió, demandó a la antigua propietaria, alegando que los fantasmas, ya sean de verdad o imaginarios, afectaban el valor de la casa y su capacidad de venderla otra vez.
El Tribunal Supremo de Nueva York le dio la razón a Stambovsky en 1991 y declaró que los vendedores tendrían que contar la historia de los fantasmas a cualquier persona interesada en la casa.
A pesar de esto, no ha habido problemas en encontrar nuevos propietarios, y la casa se ha vendido varias veces.