Es médico de Harvard, estuvo al borde de la muerte y relató su experiencia: “Como si estuviera naciendo”

Un médico de la Universidad de Harvard estuvo en coma profundo y asegura que regresó de la muerte
Es médico de Harvard, estuvo al borde de la muerte y relató su experiencia: “Como si estuviera naciendo”

Eben Alexander, es un neurocirujano de la Universidad de Harvard que estuvo en coma profundo por siete días y relató cómo vivió su experiencia en el “cielo”, luego de volver de la muerte. Por su parte el médico se describía como un escéptico de la vida después de la muerte.

Eben Alexander es graduado en Ciencias Químicas por la Universidad del Norte en Chapel Hill, con 11 años de especialización en el Hospital General de Massachusetts y con 15 años como profesor asociado de cirugía, descreía de las experiencias paranormales.

A sus 54 años el médico de Harvard, sufrió una meningitis por Escherichia Coli, una enfermedad poco común en adultos. Estas bacterias atacan primero la capa exterior del cerebro y las víctimas suelen morir en los primeros días. Sin embargo, el doctor entró en un coma profundo de una semana.

El médico contó cómo fue su experiencia en el “cielo”

Alexander relató que entró en un lugar de“oscuridad, pero visible, como si estuviera sumergido en el barro. Consciente, pero sin memoria, ni identidad”. Sin cuerpo, ni idioma, ni emociones, ni lógica, “todo eso había desaparecido”. Tras atravesar una puerta, encontró algo similar al paraíso.

Alexander, contó: “Me sentí como si estuviera naciendo. Volaba sobre aquel lugar, por encima de árboles y campos, cascadas y arroyos y de vez en cuando, personas”. Mientras volaba en esa especie de “cielo”. Asimismo, describió que iba acompañado de una chica “preciosa, de pómulos altos y hermosos ojos azules, y con cabello dorado que enmarcaban su hermoso rostro”.

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En su libro “La prueba del Cielo”, el médico relató su experiencia en el “paraíso”. “Los que sostienen que la ciencia y la espiritualidad no pueden coexistir se equivocan“, subrayó. Según Alexander, la sensación que sintió fue de “amor y aceptación incondicionales”. Era un “sitio maravilloso, reconfortante y lleno de amor”, destacó.

 

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