En los últimos años, el feminismo planteó un debate profundo sobre la posibilidad de elegir ser o no madre que generó revuelo. Para algunas personas fue polémico y para otras, liberador. Abrieron el juego para mostrar que muchas mujeres de entre 20 y 35 años deciden no ser madres y la sociedad las juzga por no cumplir con esa expectativa del modelo de familia tradicional que incluye marido, hijos y mascotas.
El mandato estaba (y en algunos casos aún está) tan marcado que no daba lugar a elegir, pero con el tiempo se empezó a comprender que se trata de una decisión y no una manera de “realizarse” en la vida, o al menos no para todos. Y, aunque todavía no está normalizado decirlo sin recibir cuestionamientos, ¿es igual la situación para los hombres del mismo rango etario? ¿se les hacen los mismos “reproches” o la lucha les sacó la mochila de romper el estereotipo permitiendo manifestar abiertamente que no quieren tener hijos?
TN entrevistó a hombres de entre 25 y 35 años y especialistas médicos sobre la opción de no tener hijos y el crecimiento de las consultas para realizarse vasectomías como una solución permanente.
“Claro que hoy hay más libertad de poder decidir no tener hijos. Aunque muchas veces nuestros padres no lo acepten y no lo entiendan. Cuesta erradicar esa construcción social que hay que casarse y tener hijos para ‘ser felices’”, dijo a TN Nicolás Castillo (35).
En cambio, Nicolás Armesto (30) señaló que sobre los hombres recae una mirada mucho más light: “En general siempre se habla de instinto maternal, que ser madre es el mayor logro que puede tener una mujer y cosas similares, aún hoy en día. Eso me hace creer que la presión fue siempre hacia las mujeres”.
“Las cosas cambiaron, pero noto todavía como existe. Pero si un hombre no se hace cargo de su hijo no es tan juzgado por la sociedad y sigue su vida como si nada. Creo que nunca se nos impuso como meta a los hombres”, completó.
En esa misma línea respondió Germán Sapia (33): “Creo que los hombres no tuvimos ni tenemos tan marcado ese ‘deber’ de ser padres, y por ende la carga social de tener que decidir y afrontar a una sociedad juzgándonos. Por ende sería medio hipócrita hablar de una mayor libertad para nosotros. Pero sí celebro que ser padres hoy por hoy se esté tornando en una decisión y no sea un mandato”.
“Siento que hace varias décadas, muchas personas estaban condicionadas a ser padres. El concepto de familia involucraba tener hijos y hoy en día ese concepto evolucionó mucho, lo que permite pensar familias de 2 o inclusive de 1 y una mascota”, remarcó Daniel Ayala (25).
Asimismo, indicó que la cultura y las familias son las que presionan: “Piensan en ser tíos o abuelos y es un tema recurrente que nunca termina. Casi que parece que todos ‘deberíamos’ tener hijos. En mi caso, no siento una presión, tampoco un deseo por hacerlo”. Federico Leyo (33) coincidió: “La familia siempre presiona. Mi papá se muere de ganas por ser abuelo y un poco me siento presionado por ese lado”.
Todos los hombres citados coinciden en algo: tienen entre 20 y 35 años y tomaron la decisión de no tener hijos.
“No quiero tener hijos”: decisión en primera persona
“No querer tener hijos fue algo que lo fui construyendo. Entre 2013 y 2015 estaba con el discurso de querer hijos, pero con el tiempo me di cuenta de que no. Hace 13 años vivo solo y construí mi independencia y soledad. Me gustan los chicos, pero no me veo cambiando mi estilo de vida que me costó tanto tener”, cuenta Castillo. En su decisión influyeron experiencias ajenas: “Viví el proceso de mis amigos en modo padres o madres y me di cuenta de que no elijo ni quiero ese camino para mí”.
Actualmente está en pareja y precisó que blanqueó su posición desde el día 1: “Desde que nos conocimos los dos manifestamos que no queremos hijos. Ninguno influyó sobre el otro, no fue consensuado, sino que los dos coincidimos en lo que pensamos”.
En el caso de Sapia también fue algo que se dio con el correr de los años: “No siempre lo pensé. Cuando era más chico tenía la idea de ser padre. Creo el detonante de la decisión fue cuando me diagnosticaron Esclerosis Múltiple, lo que básicamente me hizo rever algunas cosas. El hecho de no saber para qué lado puede disparar el tema me generaba incertidumbre sobre con qué podría cargar otra persona”. Esta situación se complementó con la elección de su novia, quien le expresó que desde el principio que nunca había tenido el deseo de maternar.
Para Leyo, el hecho de no paternar también se fue afianzando con el tiempo: “Estoy en pareja hace casi 10 años y la vida que tenemos solos nos encanta. No queremos que nada cambie. Desde salir a pasear, los recitales, viajar. Disfrutamos nuestro estilo de vida y en pandemia se reafirmó el sentimiento”.
Armesto no recuerda exactamente cuando se empezó a familiarizar con la idea de no tener hijos, pero asegura que hace muchos años se dio cuenta de que no era un deseo a cumplir. Incluso, a la hora de entablar una relación, siempre era él quien llegaba con una postura definida al respecto.
En otros, la determinación estuvo desde siempre: “Nunca me llamó la atención tener hijos. Para mí es definitivo porque desde chico pienso lo mismo”, manifestó Ayala y remarcó: “La decisión parte sobre todo por la responsabilidad de que alguien dependa de vos. Pero también porque es un gasto enorme tener un hijo/a y lo más importante es que siento que pierdo libertad en cuanto a las cosas que quiero hacer”.
Hombres que no quieren ser papás: aumentaron significativamente las consultas por vasectomías
Por otro lado, el hecho de que jóvenes decidan fervientemente no ser padres llevó a que un gran porcentaje averigüe la posibilidad de realizarse una vasectomía.
Según puntualizó Claudio Graziano, jefe de la Unidad de Urología del Hospital Durán e integrante de la Sociedad Argentina de Urología, en el último año y medio crecieron las consultas sobre esta intervención anticonceptiva más de un 90%.
“Si antes un paciente consultaba por el procedimiento cada 2 meses, ahora te consulta uno por semana. El aumento en hombres de entre 20 y 35 años es significativo”, indicó.
En ese contexto, Graziano afirmó: “La consulta predominantemente es muy puntual. El paciente viene y quiere saber cómo es y los detalles de la cirugía, el post quirúrgico. No es la pregunta sobre los anticonceptivos, sino que vienen con información previa y con una decisión tomada”.
Sin embargo, reconoció que hay médicos que no aceptan realizar esta intervención en hombres tan jóvenes: “Hay un imaginario colectivo que dice que los pibes de 25 años no pueden decidir. Tengo colegas que han cuestionado a chicos de 23 años que preguntaron por la vasectomía. ‘Ni loco se la hago’, me decían. Hay que darles la información sin influenciar en la decisión”. De todas formas aclaró que este tipo de cirugía está bajo el amparo de objeción de conciencia y el cirujano se puede abstener de hacerla.
Marito Laurens, conocido en redes sociales como “Tu carnicero amigo”, se hizo una vasectomía a los 33 años y, a partir de ese momento, intenta concientizar a otros hombres: “La realidad es que la mujer siempre tiene que hacer todo, las pasa todas y es la que más sufre. Nuestra cirugía es más simple”. Entre los detalles, destacó que se encontró con muchos chicos de entre 18 y 20 años decididos. “Tenés que estar muy seguro de hacerlo”.
La mayoría de los jóvenes consultados afirmaron que se realizarían la intervención Aquellos que dijeron que no, expresaron su temor a la operación e indicaron que prefieren usar otros métodos anticonceptivos para evitar la concepción.