Pasan las horas, pasan los días, la conmoción es la misma. La historia del denominado “clan del terror”, por el que dos hermanas menores de edad fueron víctimas de abusos aberrantes, sigue sumando capítulos.
Tal como viene informando la redacción de LA BRÚJULA 24, se trata de una causa por la que fueron detenidos la abuela, padre, tío y padrino de dos niñas, que fueron sometidas sexualmente durante varios años en Punta Alta.
Se sabe que los investigadores seguirán tomando declaraciones con el correr de los días.
Por el momento, los imputados siguen privados de su libertad en condiciones disímiles. Por ejemplo, este medio pudo saber que la actual pareja del padre de las víctimas lo fue a visitar al menos una vez a la sede Drogas Ilícitas de calle Almafuerte al 400, en Bahía, donde se encuentra recluido a la espera de que se libere un cupo en la cárcel.
Se trata de una mujer que convivía con él en uno de los barrios de Puerto Belgrano. Es personal civil de la Armada Argentina y le llevó algo de comida y elementos de higiene personal.
Su hermano, tío de las niñas, está al cuidado de la policía de la Armada, en la Ciudad de Buenos Aires, mientras que el padrino, que vivía en Neuquén, sigue en una sede policial de aquella provincia. Por los tres se aguarda un lugar dentro del Servicio Penitenciario.
Mientras tanto, la abuela, quien se presume llevaba la contabilidad cuando obligaban a las niñas a prostituirse con distintos hombres, seguirá cumpliendo arresto domiciliario.