Ésta es la única provincia en la que se multa tomar mates en el auto
Estudios revelan que cebar mientras se conduce es tan peligroso como manejar con los ojos vendados.
La tradición rioplatense que parece inofensiva esconde sus peligros. Según la Agencia Nacional de Seguridad Vial, tomar mate en el auto representa uno de los focos de distracción más peligrosos y que esa desatención es equivalente a manejar una cuada a ciegas. Tal como resulta con el celular.
Si bien no hay una normativa que lo prohíba exactamente, en el apartado ‘Reglas Generales de Conducción’, la Ley de Tránsito Nacional establece que “todo conductor utilizará las dos manos para el manejo del volante de dirección de su vehículo”.
Por este motivo, en principio, no se podría multar a un conductor por tomar mate, pero sí por no manejar con ambas manos sobre el volante. Sin embargo, existe una provincia en la que sí se tiene registro de conductores infraccionados por hacerlo.
¿En qué provincia te pueden multar por tomar mates en el auto?
La Ley Nacional de Tránsito no multa a quienes toman mate mientras conducen. Sin embargo, en Mendoza se considera una falta gravísima, por lo que se multa con 1000 unidades fijas. Y cada una de ellas tiene actualmente un valor de 54 pesos.
Esto quiere decir que, quien sea sorprendido cometiendo esta infracción, deberá enfrentarse a una multa de $54.000.
Según el decreto 326/18 de la ley mendocina que reglamenta y complementa la Ley 9.024 N° de Seguridad Vial, los conductores “deberán circular con cuidado y precaución conservando en todo momento el dominio efectivo del vehículo, entendiendo como tal la conducción con ambas manos sobre el volante, salvo al momento de cambio de velocidad o circunstancias de fuerza mayor justificada”.
Cuatros motivos por los cuales NO tomar mates en el auto
Es importante recordar que no sólo no se le permite tomar mates a quien conduce el vehículo, sino que tampoco se recomienda que otros ocupantes lo hagan, ya que cualquier maniobra brusca podría provocar un accidente aun mayor.
- Según la ANSV, “un auto que viaja a 100 km/h recorre 28 metros en un segundo, por lo que cuatro segundos cebando un mate sería como manejar una cuadra entera con los ojos vendados”.
- Durante el proceso de preparación, salpicarse con el agua caliente o el derrame de la yerba podría ocasionar una quemadura en los pasajeros e incluso en quien lleva el volante, haciéndole perder control del vehículo.
- Ante una maniobra o un impacto imprevistos, la bombilla puede transformarse en un elemento cortante que puede provocar serios daños en los ocupantes del vehículo.
- También, ante un acciente, el mate y el termo se convertirían en dos elementos contundentes.