Cómo es el marcapasos que le pondrán a Mirtha Legrand y en qué mejora la calidad de vida
A la conductora se le implantará el dispositivo el próximo martes 2 de mayo en el Sanatorio Mater Dei. La intervención es programada y ambulatoria. Cuándo se indica y para qué sirve.
“Les quiero contar que para seguir activa como a mí me gusta, y porque siempre apuesto a la vida, decidí instalar un marcapasos de última generación que regule adecuadamente mi ritmo cardíaco, algo que ya venía conversando desde la colocación de los stent hace un tiempo”, comentó en las últimas horas Mirtha Legrand a través de su cuenta de Twitter.
La implantación de un marcapasos en adultos mayores es cada vez más frecuente por el incremento del envejecimiento poblacional. Y, claro está, por la mejora de la tecnología médica actual.
Es un dispositivo electrónico diseñado para producir impulsos eléctricos con el objeto de estimular el corazón cuando falla la estimulación fisiológica o normal.
“Un marcapasos se indica cuando la persona tiene algún trastorno de ritmo que suele ser de frecuencias cardíacas bajas”, explica Juan José Herrera Paz (M.N. 85.175), jefe de Cardiología de Fleni.
El experto de forma didáctica explica que el corazón tiene un sistema eléctrico interno que está compuesto como de una usina generadora del impulso eléctrico, que es el nódulo sinusal, después tiene un cable conductor hasta un nódulo distribuidor que es el nódulo auriculo-ventricular que manda un cable al ventrículo-derecho y un cable al ventrículo-izquierdo.
“Así sería básicamente como está compuesto el sistema de conducción natural del organismo. En los adultos mayores suele fallar sobre todo a nivel del nódulo auriculo-ventricular, se producen bloqueos auriculo-ventriculares. Eso hace que la frecuencia cardíaca sea muy baja, entonces el paciente puede empezar a tener síndromes porque no acomoda las frecuencias cardíacas a las necesidades del organismo ya sea cuando se camina o se hace alguna actividad física”, resume.
El envejecimiento produce cambios estructurales y funcionales en el sistema cardiovascular, cuya principal causa es el aumento de la rigidez miocárdica, debido a fibrosis e hipertrofia.
“El marcapasos es como si fuera un aparato pensante que actúa solamente cuando el paciente lo necesita. Si el paciente está con ritmo propio y es efectivo, el marcapaso se queda frenado. Cuando censa que no hay actividad eléctrica, o sea que faltan latidos, o que los latidos se ponen muy lentos, ahí el marcapasos estimula y genera una frecuencia cardíaca, o latidos cardíacos, de acuerdo a lo que el médico haya programado”, enseña Herrera Paz.
El avance tecnológico
“Los marcapasos más avanzados, son a su vez los más chicos del mundo: se llaman micra, no llevan cables y duran entre ocho y doce años”, señala el doctor Fernando Scazzuso (M.N. 83.184), Jefe de Electrofisiologia y Arritmias del Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA).
El especialista afirma que se implanta en el ventrículo derecho, “se lo ancla con un sistema de ancla como los que tienen los barcos, se hace por punción de la vena femoral, y después de dos a tres horas de observación se le da de alta”.
“Las indicaciones son en general para pacientes muy añosos o que están comprometidos desde el punto de vista de los accesos vasculares, por ejemplo paciente en diálisis, paciente con trombosis de vena, paciente que ya se le sacó dos o tres veces el marcapasos por infección o pacientes que van a ir a trasplante y necesitan tener accesos vasculares muy buenos”, ejemplifica.
Las claves del mini marcapasos
- El procedimiento para su implante se caracteriza por ser mínimamente invasivo y se realiza trasladando el dispositivo a través de la vena femoral ubicada en la pierna del paciente hasta su corazón, donde finalmente se inserta para quedar allí alojado.
- La intervención demora minutos y habilita al paciente a retomar su vida normal al día siguiente.
- Al no requerir incisión, se reducen las complicaciones derivadas por problemas de cicatrización (un punto más que beneficioso para los pacientes con este tipo de patología, por ejemplo, personas con diabetes).
- Al no utilizar cables, además, descarta cualquier riesgo de infección, y su estructura desarrollada en titanio puro, ofrece la tranquilidad de no presentar rechazos por alergias.
- Es invisible, lo que en términos estéticos y de autoestima, resulta muy conveniente porque elimina la necesidad de buscar la forma de mantenerlo oculto a la mirada ajena.
- El funcionamiento del marcapasos se basa en ingeniería de algoritmos y programación, algo totalmente distinto a lo conocido, así como también el desafío tecnológico que implica tener una batería con una duración de 8 a 13 años en un tamaño tan reducido.