Bullrich presiona sobre la interna de la UCR y busca acelerar un armado nacional con el radicalismo disidente
La candidata a presidenta quiere reeditar el encuentro con dirigentes de peso que le pelean poder a Gerardo Morales dentro del partido. También reforzó el apoyo a Jorge Macri en la Ciudad.
Mientras el Gobierno nacional y el Frente de Todos atraviesan una nueva crisis, el calendario electoral sigue su curso y en la oposición se aceleran las negociaciones y los armados, a dos meses para el cierre de listas.
Asi, Patricia Bullrich suma presión sobre la interna de la UCR nacional -donde negocia un nuevo encuentro con los radicales que desafían a Gerardo Morales dentro del partido- y sobre la interna porteña del PRO, donde refuerza el respaldo a Jorge Macri.
El pasado 4 de abril, la fiesta de la Vendimia mendocina fue escenario de una guerra de señales dentro de Juntos por el Cambio. Bullrich acordó con un grupo de radicales una foto: estuvieron los gobernadores de Mendoza y Corrientes, Rodolfo Suárez y Gustavo Valdés, los senadores Alfredo Cornejo -que irá otra vez por la gobernación mendocina-, Carolina Losada -que se prepara para lanzarse como candidata a gobernadora en Santa Fe con un bullrichista como vice- y Luis Naidenoff, entre otros.
Además del anticipo de una posible alianza rumbo a las elecciones presidenciales, la foto oficializó la existencia de un polo de poder dentro de la UCR en disidencia al presidente del partido, Gerardo Morales, que tejió su propia alianza interna con Martín Lousteau y mantiene un claro vínculo de cercanía con Horacio Rodríguez Larreta, aunque todavía sostiene su candidatura presidencial. Por la ocasión en la que se dio el encuentro, el grupo de dirigentes recibió el nombre de “Grupo Malbec”.
De las fotos en la Vendimia también participó Facundo Manes, que por ahora también mantiene sus aspiraciones presidencialistas. Pero el neurocientífico radical es menos claro en sus intenciones y por lo tanto -y así lo interpretan en el PRO- más impredecible. No se lo incluye como un integrante del grupo, aunque mantiene su propio enfrentamiento interno con Morales. Maximiliano Abad, que preside el partido en Buenos Aires, es otra de las incógnitas.
Estado de sospecha: tanto en el sector del radicalismo disidente como en el bullirchismo entienden que el presidente de la UCR ya tiene cerrado un acuerdo con Larreta y que terminará declinando su candidatura presidencial para ir a las PASO de JxC como vice del hoy jefe de Gobierno porteño. A la inversa, los dirigentes de Morales acusan a sus correligionarios de trabajar para una candidatura del ala dura del PRO, en lugar de para fortalecer a la UCR dentro de la coalición opositora.
Según confirmaron a TN fuentes del PRO y de la UCR, Bullrich conversa con los radicales de la Vendimia la posibilidad de replicar la semana que viene un encuentro en Buenos Aires como el de hace un mes y medio en Mendoza. En paralelo, Larreta viajaría a Jujuy antes de las elecciones provinciales del 7 de mayo, y lo recibiría Morales como el actual gobernador jujeño.
“Estamos conversando. Hay que reforzar la idea de este grupo que actúa como un bloque. Representamos a los dirigentes del radicalismo con votos, el grupo que tienen más relación con la gente. Pero eso solo sería menospreciar, también hay una estructura partidaria atrás, aunque Morales quiera decir que tiene el 90% del partido con él”, dijo a este medio uno de los radicales que participó de la foto de la Vendimia.
Nadie habla de un acuerdo cerrado y menos de una candidatura vicepresidente. Después de todo, coinciden de un lado y del otro, las candidaturas y las alianzas se resolverán más cerca de junio que de mayo. Pero sí se habla de conversaciones avanzadas. “Iniciamos algo en Mendoza que estamos construyendo, es un paso a paso y hay que continuarlo”, señalaron en el PRO.
Aunque la intención es que el nuevo encuentro se produzca la semana que viene, el calendario electoral de las provincias podría poner algunas trabas. En los próximos días es el cierre de listas en Corrientes, donde manda Valdés. El martes, la UCR, el PRO y el Socialismo santafecino lanzarán el “frente de frentes” bajo el nombre de Unidos para Cambiar Santa Fe: Carolina Losada podría anunciar su candidatura a gobernadora, acompañada por Federico Angelini -uno de los armadores de campaña de Patricia Bullrich y hoy presidente del PRO en su reemplazo.
Patricia Bullrich y Jorge Macri
“Jorge Macri es mi candidato a jefe de Gobierno, definitivamente”, ratificó este miércoles Patricia Bullrich. La extitular del PRO y el expresidente Mauricio Macri mantienen la presión para que Horacio Rodríguez Larreta baje las candidaturas de la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, y su par de Salud, Fernán Quirós, que hoy también están anotados a la carrera por la jefatura de Gobierno.
Según indican en Uspallata, el mandatario porteño seguirá mostrándose con todos los candidatos del PRO, fundamentalmente en actividades de gestión. De hecho, este jueves compartió con el propio Jorge Macri el anuncio de que 80 trámites pasarán a ser gratuitos en la Ciudad, y ratificó que el PRO finalmente tendrá un solo candidato. Pero, como anticipó TN, no bajará por ahora a Quirós y Acuña.
Como con los radicales del grupo Malbec, Bullrich también conversa con el primo del expresidente la posibilidad de un encuentro para fines de la próxima semana. De concretarse, dejaría una nueva señal para la interna del PRO, que llegó a niveles de máxima tensión luego de que Rodríguez Larreta -en contra de los deseos del ala dura del partido, que lo acusa de beneficiar al radical Martín Lousteau- definiera la separación de la elección porteña respecto de la nacional.
Bullrich se encargó despejar algunas dudas en las últimas horas y aclaró que, aunque se sumó recientemente a su armado presidencialista, no acompañará a Ricardo López Murphy en su candidatura a jefe de Gobierno porteño. “Siempre voy a elegir a un postulante del PRO porque es mi partido”, advirtió.