Un delincuente entró a una propiedad en La Plata para cometer un robo y terminó “atado como un matambre”

El ladrón atacó por la espalda a un comerciante de 76 años. Cuando fue rodeado por la policía, intentó escapar poniéndole un cuchillo en el cuello a la víctima.
Un delincuente entró a una propiedad en La Plata para cometer un robo y terminó “atado como un matambre”

La inseguridad en Argentina no tiene límites. En las últimas horas, un terrible episodio sacudió en el barrio platense de San Carlos: un delincuente tomó por sorpresa a un hombre de 76 años y se coló en su vivienda para robarle sus pertenencias.

De acuerdo con un reporte oficial, el hecho tuvo lugar en la Avenida 44, entre las calles 151 y 152 de la ciudad de La Plata. Allí, la víctima, de profesión comerciante, quedó a merced de un asaltante que lo amenazó de muerte.

Según la víctima, el ataque comenzó con un descuido. Muy posiblemente porque haya dejado una puerta o alguna reja de la casa abierta. Sin embargo, tampoco se descarta una aparición repentina del ladrón mientras el anciano ingresaba al domicilio.

Una vez que el delincuente dominó la escena, comenzó a amenazar al comerciante para que le entregue todo su dinero y otros objetos de valor. Afortunadamente, algunos transeúntes se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo y llamaron a la Policía.

Minutos más tarde, a través de un gran despliegue de automóviles y uniformados, comenzó una tensa negociación para que el asaltante depusiera su actitud. Fue en ese momento cuando el delincuente tomó por la espalda al comerciante y le puso un cuchillo de carnicero en la garganta. A los gritos, el ladrón comenzó a alejar a todos y a pedir que lo dejaran escapar.

Sin embargo, en un descuido del asaltante, los oficiales pudieron abordarlo, desarmarlo e inmovilizarlo con sogas, quedando tendido en el suelo y “atado como un matambre”. De esta manera, los agentes lo subieron en el auto policial y lo llevaron a la sede de la subcomisaría La Unión.

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Según confirmaron fuentes oficiales, el asaltante vive en las inmediaciones de la finca en la que intentó cometer el robo. La imputación, en principio, es por “robo y amenazas”, pero habrá que esperar a ver como se va a desenvolver el caso. Más allá del susto, el comerciante no sufrió heridas.

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