El Gobierno amplía la presencia militar en el sur y despliega aviones de combate cerca de las Islas Malvinas
En primera instancia movilizarán tres aviones IA-63 Pampa III. Luego está previsto que haya helicópteros. Es una zona estratégica por la seguridad nacional.
Con el objetivo de aumentar la presencia militar en la estratégica zona sur de la Argentina, el Gobierno nacional desplegó aviones de combate Pampa III en la recuperada X Base Aérea Militar, ubicada en Río Gallegos, provincia de Santa Cruz.
Esta es un área clave en términos de seguridad y geopolítica. Es uno de los puntos de comunicación con la Antártida, está a poca distancia de la frontera con Chile y, por sobre todas las cosas, se encuentra frente a las Islas Malvinas.
“La reapertura de la X Brigada está directamente vinculada con la visión de una Argentina que proyecta hacia el Sur, hacia el Atlántico, las islas y la Antártida que son componentes estratégicos para el desarrollo del país”, afirmó Jorge Taiana, el ministro de Defensa.
De esta manera, el Gobierno reabrió la emblemática Brigada X sel sur de la Argentina que había sido disuelta hace treinta años. Forma parte de un proceso de modernización militar que comenzó en 2015 y continúa al día de hoy.
Aviones de combate y helicópteros militares para la nueva base
La nueva base aérea estará ocupada por tres aeronaves IA-63 Pampa III que estaban dispuestos previamente en Tandil, provincia de Buenos Aires. Son aviones de guerra con capacidad de ataque, transporte, artillería y vigilancia.
Según distintas fuentes del Ministerio de Defensa, la intención de la Argentina es establecer allí un escuadrón de combate, aunque la conformación del mismo puede demorar años y requiere de un proceso de capacitación y abastecimiento logístico.
En esa línea, el ministro Taiana aseguró que su cartera prevé en el corto plazo llevar adelante el despliegue de helicópteros aptos para el sostén logístico antártico y para los servicios de búsqueda y salvamento militar.
Desde mayo del año pasado también funciona en Río Grande, Tierra del Fuego, un radar de Vigilancia y Control Aéreo RPA-170M producido por INVAP, que incrementó la capacidad de vigilancia del aeroespacio en el Atlántico Sur.
Todas estas herramientas buscan también aumentar el patrullaje del espacio marítimo argentino, inclusive en la milla 200, donde llegan cientos de barcos pesqueros extranjeros para operar sin regulaciones y quedarse con el control de muchos peces que podrían ser pescados del lado argentino.
Consultados por TN, desde el Reino Unido afirmaron que no tenían declaraciones para hacer sobre este movimiento militar ya que correspondía a “una decisión interna de la Argentina” que no los involucraba.