Axel Kicillof se quejó ante Cristina Kirchner por la inflación y exigió más controles de precios
El gobernador bonaerense le reclamó a la Vicepresidenta que haya más “mano dura” con los empresarios, en un clima de fuertes críticas y peleas en el Gobierno en un año electoral.
El anuncio de 6% de inflación de enero cayó como una bomba en el Gobierno, en un clima de extrema tensión en el oficialismo, con múltiples críticas, pases de factura y peleas en un año de elecciones. El fuerte enojo en el Frente de Todos incluyó quejas del gobernador bonaerense, Axel Kicillof, a la vicepresidenta Cristina Kirchner para que haya mayor “mano dura” con los empresarios y que se intensifiquen los controles.
Justamente el programa Precios Justos, una de las estrategias con las que el Gobierno apuesta a contener la escalada inflacionaria, fue fruto de la presión de Kicillof y Cristina Kirchner. Aunque este tipo de medidas se aplican desde agosto de 2020, no tuvieron éxito en el intento de la Casa Rosada de frenar la suba de precios.
La inflación de enero fue mayor a lo prevista por la Casa Rosada, como anticipó TN, y genera una fuerte alerta en el Frente de Todos, en especial en los gobernadores, que aspiran a una baja del Índice de Precios al Consumidor (IPC), para ser más competitivos en las elecciones.
Se descarta que en la cumbre de la mesa política del Frente de Todos del jueves, convocada por el presidente, Alberto Fernández, los sectores más radicalizados del kirchnerismo saldrán a hacer advertencias y críticas por la inflación, con exigencias de un cambio de rumbo de gestión, frente a la preocupación en vista a las elecciones.
En Economía dicen que la inflación va a ceder
Hubo conversaciones entre Alberto Fernández y Massa por la inflación del 6% de enero, y en el Ministerio de Economía dicen que la remarcación de precios va a ceder. Plantearon que hubo aumentos imprevistos, en especial en frutas y verduras, con fuertes subas en productos como el tomate, que llegó a escalar 80%.
En enero se registraron además otras subas que estaban contempladas como el aumento en turismo, rubro al que apostó el Gobierno, sumado al alza en tarifas de luz en el interior que empujaron el IPC del mes pasado. En el Gobierno confían en que, una vez pasado este pico, la inflación vuelva a bajar y llegue al 3%.
Gabriel Rubinstein corrigió la proyección de inflación: rondará el 3% mensual recién a fin de año
Tras conocerse la inflación de enero el segundo de Massa, el secretario de Programación Económica, Gabriel Rubinstein, corrigió la estimación de inflación prevista inicialmente. El economista habló del impacto de “factores inerciales” como el clima y las vacaciones y proyectó que recién para fin de año el IPC se acercará al 3% mensual.
Rubinstein escribió en Twitter: “En el registro de enero, tenemos fuertes subas en: a) frutas y verduras (por factores estacionales y climáticos), b) algunos rubros regulados (colectivos, gas, agua, tabaco, cable, medicina prepaga, c) servicios de turismo (por vacaciones)”.
El secretario de Programación Económica dijo que “los fundamentos macro son consistentes con un IPC del 4% o menos” y destacó los acuerdos de precios, que consideró que dijo que les permitirán “seguir combatiendo los altos factores inerciales presentes”.
El número dos de Economía dijo que trabajan “desde la macro y desde la micro, para que la inflación baje significativamente” y que prevén que para fin de año la inflación se aproxime al 3%, en el orden del 60% anual.
La inflación de enero avivó las críticas del cristinismo a Sergio Massa
El dato de inflación de enero recalentó las críticas de los “gurkas” de Cristina Kirchner a Massa, como anticipó TN. Aunque el ministro de Economía cuenta con el respaldo de la Vicepresidenta recibe fuertes cuestionamientos de su entorno, que lo acusa de tener una “actitud muy permeable con los bancos y las cerealeras”.
El ministro de Economía responde en privado a los ataques del cristinismo, se reunió con la Vicepresidenta y le mandó un fuerte mensaje a la organización encabezada por Máximo Kirchner: “Si gobernara La Cámpora, nos habríamos puesto el Gobierno de sombrero”.