A partir del 1° de noviembre termina la comercialización de la media res vacuna y entra en vigencia el esquema de troceo dispuesto por el Gobierno nacional, una resolución que le pondrá fin a décadas de reclamos que no encontraban eco favorable.
Pablo Barayazarra, titular del Sindicato de Obreros y Empleados de la Industria de la Carne, analizó en LA BRÚJULA 24 los alcances de esta nueva normativa: “Es una medida que se venía buscando hace muchos años porque preserva la salud de los trabajadores”.
“Hombrear medias reses durante años te arruina, con hernias de disco y lumbalgias que no cubren las ART. Una media res pesa entre 80 y 110 kilos y son trasladadas entre 15 y 20 metros, incluso hasta subiendo escalones. Ahora, se va a trozar la media res porque los cortes que no pueden superar los 32 kilos, supongo que vendrá el asado completo, el bife por otro. Acá deberá verse el trabajo de control de Senasa”, sostuvo Barayazarra, en su charla con el periodista Germán Sasso.
Luego, el sindicalista reconoció que “al carnicero quizás no le gusta tanto la nueva legislación porque está acostumbrado a trabajar su producto. Inicialmente hará un poco de ruido, hasta que se vaya hermanando la tarea, la cual no será fácil de implementar”.
“Se está velando por el bienestar del trabajador. Debemos ser únicos en el mundo los que aún trasladamos la media res”
“Creo que si el carnicero vende más asado, va a pedir más cantidad de ese corte, lo propio si tiene más movimiento de aguja o alguna otra variante igual de económica. No sería descabellado pensar en que bajen los precios porque se dejarán de picar cortes caros que no se vendían, porque estaban obligados a comprar la media res completa”, agregó.
Por último, afirmó que “nosotros tenemos 500 trabajadores en Bahía, más allá de que muchos dueños de locales están afiliados a otro sindicato”, al tiempo que concluyó explicando que “la entraña y la molleja son cortes caros porque no abundan en la vaca”.