Los delitos rurales no se detienen y Francisco Hidalgo, un productor agropecuario de General La Madrid, en el sur de la provincia de Buenos Aires puede dar buena cuenta de ello.
Este domingo por la mañana recibió el llamado de su empleado, avisándole que un vecino había visto algo raro en los bolsones con granos que tenía en su campo. Rápidamente fue al lugar, ubicado solo a seis kilómetros de la ciudad, donde se encontró con el peor escenario: le habían roto nada menos que 11 silobolsas con 180 toneladas de maíz, estimando un valor de 70 millones de pesos.
Indudablemente se trata del mayor acto de vandalismo contra bolsones desde que comenzaron a tomar intensidad hacia el año 2020. Según indica La Nación, que comenzó entonces a llevar registro, ya lleva contabilizados 263 ataques, incluido el de La Madrid.
“Estaba anunciado lluvia para el domingo a la noche, así que teníamos que levantar esos granos lo antes posible si no, corríamos el riesgo de perder toda la producción”, contó Hidalgo a La Nación.
Colaboración solidaria
Como ocurre siempre en estos casos, los damnificados reciben el auxilio y la colaboración solidaria de vecinos y empleados, que, en pocas horas, con palas manuales y una hidráulica, y bolsas viejas trabajaron desde las nueve de la mañana hasta las seis de la tarde para juntar todo el maíz.
Con el apoyo solidario de vecinos y empleados, el maíz fue recogido y los silobolsas cubiertos provisoriamente.
“Vamos a tener algunas pérdidas, pero van a ser menores gracias a que nos ayudaron a levantar todo”, dijo el productor, que resaltó la solidaridad de quienes se acercaron a ofrecer su ayuda. “Fueron muchas horas de trabajo y eso es lo nos impulsa y nos da ganas de seguir trabajando y apostando al país”, dijo.
Hidalgo no tiene ninguna sospecha de quien pudo haber sido. Cree que al delito lo cometieron durante el sábado y que ingresaron en el campo caminando y con un cuchillo cortaron los bolsones, que no se ven desde la ruta.
Entre otras cosas, el productor dijo al medio capitalino que no lo siente ”como un ataque o agresión hacia mí o hacia la empresa. Nosotros cumplimos con nuestras obligaciones y tratamos de ser respetuosos con la gente y los proveedores. Tenemos todo en regla”, afirmó.
“Estamos en una situación difícil, hay mucha gente frustrada e indignada y por ahí busca un enemigo. Prefiero rescatar la solidaridad de la gente que nos ayudó”, señaló.
Vale recordar que hace tres meses se había generado una polémica en torno a los silobolsas luego de que el presidente Alberto Fernández apuntara contra el campo, al señalar que “guardan 20.000 millones de dólares y no los liquidan, esperando una mejor rentabilidad cuando el país los necesita”. (Fuente: La Nación)
