“¿Cómo vamos a aprobar las cuentas de un gobierno que aumentó el 70% la planta política y que encima es cara y no funciona?"

La concejal del bloque Alianza Juntos Lourdes Fernández dio detalles de lo trabajado en comisión, donde hubo dos dictámenes: uno de minoría y otro de la mayoría de Juntos, que fue el que se aprobó finalmente en la sesión especial. “El dictamen de la mayoría de Juntos no aprobó la Rendición de Cuentas”, informó Fernández con nuestros votos, ya que el bloque de Flavio Diez y María José Lacoste se sumó al dictamen de minoría del Movimiento que sí aprobaba la Rendición”. Vale aclarar que estuvo ausente Gastón Gaspé, que ha constituido un bloque peronista unipersonal”. 

Prosiguiendo con su explicación, la concejal manifestó que cuando el bloque de Juntos comenzó a estudiar la Rendición de Cuentas, notaron que si bien los gastos realizados en 2021 se habían realizado de acuerdo a las normas contables que especifica la Ley Orgánica en el reglamento de contabilidad, consideraron que no tenían un criterio correcto en cuanto a la distribución de los gastos municipales.

“Por ejemplo, ¿cómo vamos a aprobar una Rendición de Cuentas de un municipio que se empeñan en sostener una planta de funcionarios que tuvo un aumento del 70% con respecto al gobierno anterior?”, se preguntó la concejal. “Consideramos y sostenemos que esta planta es innecesaria, porque además de que es carísima, las cosas no funcionan mejor porque haya más funcionarios, todo lo contrario”.

Fernández marcó que se ha gastado mucho más dinero en sueldos que en 2020 pero a pesar de ello no se pudo emparejar la tasa de inflación del 2021. “Un 45% aumentaron los sueldos, así que los empleados municipales quedaron por debajo de la inflación y por eso hoy estamos con en conflicto entre los empleados y el municipio”. “Tenés una planta de funcionarios gigante y exagerada y no podés compensar y pagarle los sueldos adecuados a los empleados, se quedan siempre un poco más abajo que la inflación”, reflexionó. 

Más inflación, menos obras

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La concejal Fernández señaló también que los saldos en los recursos afectados se incrementaron en un 220% respecto de 2020, quedando un remanente de $ 346 millones. “Esto muestra una subejecución del presupuesto destinado a la obra pública, que resulta bastante paradójico”, marcó. “Con la inflación que existe se ejecuta una parte del total de lo previsto, teniendo reposando la plata en las cuentas bancarias y perdiendo día a día contra la inflación”.

La edil apuntó que la tardanza en las obras pasa por falta de gestión y no tanto por la burocracia lógica y real que existe.

“Hasta que se arranca la obra, la inflación se come un montón de plata. Entonces la depositan en cuentas bancarias, pero igualmente el interés que te da la cuenta bancaria jamás compensa la tasa de inflación y así es siempre perder y perder”, determinó. “Lo que genera esto no es que ahorraste ni dijiste ‘soy un crack porque puse la plata en el Banco y me lleno de plata’, sino que perdés y no cumplís con las obras que tenés que hacer”. 

La famosa ciclovía

Un tema muy en boca de todos es la famosa ciclovía de la ciudad. Sobre la parte realizada en la Avenida Sixto Rodríguez, la concejal Lourdes Fernández denunció que existen irregularidades que no están claras. “Este bloque, con la composición anterior en el 2021, manifestó en varias oportunidades el tema de la ciclovía de Sixto Rodríguez, donde ‘se comieron’ la base calcárea de piedra”, refirió. “En ese momento se presentó una minuta en el Consejo preguntando dónde está la base calcárea que estaba presupuestada, que no se puso y la ciclovía se está rajando”.

“Nunca jamás dieron explicaciones de qué había pasado con esa plata”, añadió. “Nunca se pudo comprobar si realmente fue la inflación la que se comió la piedra”.

Un mal evitable

La concejal Fernández habló también de las incubadoras rotas en el sector de Neonatología del Hospital Municipal. “Las incubadoras seguramente se empezaron a romper en el 2021, no se debe haber roto todas en el 2022. Esas incubadoras empezaron a estar ahí tiradas, arrumbadas, nadie las reparaba”, resaltó. 

“Nosotros somos uno de los pocos municipios de la provincia de Buenos Aires donde el municipio, producto de la pandemia, comenzó a cobrar un 10% más sobre la tasa vial y un 10% más sobre el ABL y sanitarios, eso llegó para quedarse y todavía está. Un porcentaje va destinado a un fondo denominado ‘Contribución para el financiamiento de insumos hospitalarios’ y afectaba la compra de insumos y gastos del área de Neonatología del Hospital Municipal de Coronel Suárez y gastos de funcionamiento que demande el Hospital Municipal de Suárez y de Huanguelén”, detalló.

“Son 30 millones aproximadamente de la tasa vial anual que ingresan a ese fondo de contribución, más el 10% del ABL y el sanitario. De todo eso, ¿no hubo un peso para reparar las incubadoras cuando comenzaron a romperse las primeras y a fallar?”, cuestionó. “Hoy tenemos que estar acudiendo a una cooperadora, a los vecinos, al privado para que eso se pueda solucionar”, se lamentó.

Excesos presupuestarios aprobados

La concejal destacó que lo que sí se aprobó fueron los excesos presupuestarios de salud por $ 95.179.093. “Se aprobó por obvias razones que tienen que ver con el producto de la pandemia Covid 19”, indicó. “Y se aprobó en distintos objetos de gastos un exceso presupuestario que tuvo que ver con plata que pagó el municipio en obras como ciclovía etapa uno, recuperación de espacios públicos, programas de emergencia educativa, colectora Villa Belgrano, pavimento barrio Brandenberg, algunas obras de cloacas, Juegos Deportivos de la provincia, porque el 31 de diciembre el dinero no había llegado al municipio, y con la promesa de provincia, el municipio puso la plata para esas obras y después a largo de parte de enero ,febrero y marzo, ese dinero llegó”, finalizó la concejal.