La Selección argentina volverá a presentarse luego de superar con éxito su camino en las Eliminatorias Sudamericanas y disputará una de las últimas pruebas en la previa del Mundial de Qatar 2022. En este contexto, el seleccionado nacional se encuentra en Bilbao, concentrando a la espera del partido ante la Selección de Italia en el marco de la Finalissima, que tendrá lugar este miércoles en Wembley. En este contexto, Lionel Messi brindó una entrevista exclusiva a TyC Sports, donde habló de todo.
Para comenzar, el capitán de la Selección recordó el año post obtención de la Copa América: "Fue algo que no imaginaba nunca todo lo que pasó después de la Copa, la alegría que tenía después de haberla peleado tanto tiempo y conseguir algo con la Selección. Después de muchos veranos tristes, de haberla pasado mal, de haber perdido finales, fue un verano diferente. La felicidad era completa, tenía pensado que todo siguiera de la misma manera como había sido el año anterior, en Barcelona, como toda mi vida. En el medio pasó todo lo que pasó".
Sobre su salida de Barcelona tras una vida en el club, exclamó: "La verdad que fu un cambio duro, un año difícil sinceramente. No fue fácil la adaptación, después de estar toda la vida en el mismo lugar. No es fácil con la edad que tengo, una cosa es hacerlo más joven o preparado. Yo en ese momento no lo quería, no lo imaginaba. Fue un año difícil la verdad".
"Siempre lo dije, yo en Barcelona tenía todo, me fui de muy chico. Es más, viví más en Barcelona que en Argentina. Estaba muy bien, no tenía pensado cambiar nada, por suerte la adaptación de los nenes fue muy fácil, se adaptaron rapidísimo a la escuela, los nuevos amigos y al día a día. Para Antonella y para mí fue más difícil", expresó Messi.
Para finalizar, recordó su charla con Antonela cuando empezaron las clases para sus hijos: "El primer día de colegio fue terrible, salimos los dos llorando, diciendo '¿qué pasó acá?', no entendíamos nada. Ellos unos fenómenos los tres. Thiago entiende más la situación, no dijo nunca nada. Más allá de que extrañaba Barcelona y los amigos, se terminó adaptando rápido. Mateo hace relaciones más rápido y se suelta más fácil. Para Ciro era la primera vez que iba a la escuela, era el que menos nos preocupaba".