Los misterios que giran en torno a la creación del universo y a la vida extraterrestre no dejan de sorprender a la humanidad. Desde películas de aliens hasta documentales dedicados al espacio exterior, la astronomía despierta curiosidad en los habitantes del planeta tierra.
Una de las teorías que más llamó la atención en los últimos días fue la de Avi Loeb, el Director del departamento de Astronomía de Harvard, que se expresó sobre el origen del Universo a través de un artículo publicado por Scientific American.
“Dado que nuestro universo tiene una geometría plana con una energía neta nula, una civilización avanzada podría haber desarrollado una tecnología que creara un universo de la nada a través de un túnel cuántico”, señaló Loeb.
Las palabras del especialista inquietaron a la comunidad científica y fueron tema de debate en las redes sociales, ya que aseguran que el Universo fue creado por aliens en un laboratorio.
Esta teoría tiene que ver con la existencia de un poder superior que podría estar dirigiendo nuestro destino y al mismo tiempo suma el concepto secular de la gravedad cuántica, que incorporaría la gravedad a la teoría de la mecánica cuántica.
Además el físico especializado en astrofísica y cosmología introdujo una nueva manera de clasificar a las civilizaciones avanzadas que se opone al sistema del astrofísico soviético Nikolai Kardashev.
Loeb ideó un marco que desglosa las civilizaciones avanzadas en clases basadas en su capacidad para “reproducir las condiciones astrofísicas que llevaron a su existencia”.
Según su teoría, lo terrícolas entraríamos en la clase C por ser considerada una civilización de bajo nivel tecnológico. Si el sol muriera de repente, los humanos no seríamos capaces de recrear nuestras condiciones actuales para mantener la vida en la tierra tal como la conocemos.
En cambio, lo aliens entrarían en la civilización de clase A y podrían ser capaces de generar importantes cantidades de energía oscura para crear un “universo bebé” o diferentes universos más pequeños que podrían engendrar vida en el mejor de los casos.
