No se abrió el paracaídas y murió tras tirarse desde 1000 metros de altura
Una joven de 23 años falleció en Estrasburgo, Francia. No se sabe si tenía un segundo paracaídas. Hubo un desesperado intento por salvarla.
Una joven de 23 años murió luego de una caída libre de más de 1.000 metros, luego de lanzarse desde una avioneta.
El deceso se produjo porque su paracaídas nunca se abrió.
La víctima fue identificada como Romane Hourcastagnou y el hecho ocurrió en la ciudad de Estrasburgo, donde ya se abrió una investigación.
La policía actualmente se encuentra averiguando si el implemento fue manipulado antes del salto, o si se trató de una desafortunada falla.
La actividad se dio con un grupo de 10 personas, quienes salieron desde un aeródromo para realizar la caída libre. Los antecedentes indican que todos tenían experiencia previa.
Los primeros resultados de la investigación aseguran que dos paracaidistas expertos que saltaron con ellos esa tarde intentaron, en las alturas, realizar una maniobra para salvar a la muchacha, pero esta no resultó.
No se reveló información respecto a si la muchacha contaba con el paracaídas de reserva durante la actividad.
Uno de los testimonios indicaba que: “Observaron lo sucedido con gran impotencia, luego que el paracaídas no se abrió, y que el impacto contra el suelo fue muy violento”.
Los servicios de emergencia llegaron hasta el lugar pero no pudieron hacer mucho por salvar a Hourcastagnou, quien falleció luego de impacto con la tierra.
La joven era una de la integrantes que más experiencia tenía en este tipo deportes en el grupo.
Sin ir más lejos, los registros indicaban que había realizado el salto desde avioneta en una 100 ocasiones, antes de su deceso.