Este lunes, el policía Luciano Nocelli fue condenado a 25 años de cárcel tras haber sido encontrado culpable del delito de "homicidio calificado". El hecho por el que se lo condena sucedió en la provincia de Santa Fe, en 2019, cuando mató a quemarropa a Jimena Daiana Gramajo y Maximiliano Rosasco tras un intento de robo.
Para los jueces Román Lanzón, Carlos Leiva y Mariano Aliau, Nocelli abusó de sus funciones como miembro integrante de una fuerza de seguridad. Según la investigación, el policía efectuó dos disparos con su arma reglamentaria contra Gramajo (25) y le disparó en al menos dos ocasiones a Rosasco (35), cuando ya estaba en el piso y desarmado.
Ese día, las cámaras de seguridad ubicadas en la intersección de la calle Buenos Aires y el Boulevard 27 de febrero de Rosario, Santa Fe, captaron toda la situación. Allí, cerca de las 22.10 del 21 de mayo de 2019, un móvil policial gira hacia a la izquierda, donde Gramajo esperaba sobre una moto.
Instantes más tarde, la mujer cae al piso y aparecen en la escena Rosasco con Hugo Leone, el otro policía que iba sobre el patrullero. En ese contexto se inicia un enfrentamiento a corta distancia, pero el agente policial cae al suelo. Luego, el delincuente rodea la moto y cae al suelo, aparentemente herido y desarmado.
Según los peritos, el policía ahora condenado a 25 años realizó al menos dos disparos contra el hombre y, la mujer, fue baleada a una distancia máxima de 70 centímetros. Para los jueces, cuando Nocelli efectúa los disparos ya no existía peligro para terceros ni tampoco para los agentes. En tanto, decidieron absolver a su compañero, Hugo Leone, ya que consideraron que disparó justificadamente contra el delincuente porque "suponía una amenaza" para su integridad física.
Tanto el joven, quien tenía un antecedente por tentativa de robo, como la joven que lo acompañaba, murieron horas después en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez.
