El secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal (Suterh), Víctor Santa María, hizo decenas de trayectos aéreos en un helicóptero Bell 407 F que el sindicato compró supuestamente con fines sanitarios, según reconstruyó LA NACION.
El Bell 407 F de matrícula LV-IKC tiene un valor aproximado de 2.700.000 dólares, de acuerdo con fuentes del mercado, y es propiedad de la firma Bhrisa S.A desde julio de 2018. Antes le perteneció al empresario y presidente del Comité Olímpico Argentino Gerardo Werthein, con quien Santa María mantiene un vínculo aceitado, pero el Suterh adquirió el 100% de las acciones de Bhrisa S.A el año pasado, y entonces el helicóptero se volvió un activo del sindicato. “Es para uso sanitario y civil”, agregó el gremialista. Aún así, a partir de una reconstrucción que hizo LA NACION, Santa María utilizó el helicóptero para trasladarse con fines que exceden su rol de gremialista. Consultado por este medio, dijo que lo utiliza “para ganar tiempo, por una cuestión de rapidez”. También argumentó que como los trayectos en helicóptero son más rápidos, con su uso como medio de transporte se evita el gasto de dinero en hospedaje.
Consultado por este medio sobre si la aeronave tiene equipamiento sanitario, como suelen tenerlo los helicópteros destinados a ese uso, Santa María dijo que tienen un “equipo móvil que se usa cuando hace falta”.
Santa María se subió al Bell 407 F el lunes pasado rumbo a Montevideo, donde participó de la sesión del Parlasur. Embarcó en el helipuerto Baires Madero, hizo una parada en el Aeropuerto de San Fernando, donde realizó los trámites migratorios, y voló hasta el Aeropuerto Internacional Ángel S. Adami, en Montevideo. Cuando la sesión terminó, el helicóptero lo trajo de vuelta a Buenos Aires. La sesión del Parlasur de la que Santa María participó en su carácter de diputado de ese órgano no tenía relación con sus tareas como secretario general del Suterh, pero el sindicato asumió el gasto del viaje.
El helicóptero “duerme” en el helipuerto Baires Madero, y Bhrisa S.A le alquila ese servicio a la empresa Modena Air Services, por el que paga unos 1000 dólares mensuales, según supo este medio. Aunque fuentes del mercado señalaron que el valor comercial de los trayectos de esta aeronave pueden rondar los $9500 dólares, Santa María dijo a LA NACION que cada hora de vuelo tiene un costo para el sindicato de $700 dólares y justificó su uso. En la Comisión Directiva del Suterh figura Francisco Santa María como secretario de la Obra Social y Previsión Social, a la que el helicóptero le factura este servicio, según dijo una fuente que conoce la dinámica del gremio a LA NACION.
El fin principal de haber adquirido esta aeronave es trasladar pacientes, dijeron fuentes del Suterh a este medio. Según los registros a los que accedió LA NACION, el mismo helicóptero trasladó 19 veces a Santa María, 12 veces al coordinador de medios del Grupo Octubre Mariano Blejman (según explicaron en su entorno, hay viajes suyos a Montevideo porque allí está la Agencia Regional de Noticias), y cuatro veces al exministro de Educación Nicolás Trotta, quien también tiene un cargo en el Grupo Octubre.
La información de las fechas en las que despegó y aterrizó el Bell 407 F que arrojan los registros a los que accedió este medio coincide con algunas actividades que mostró Santa María en sus redes sociales. Algunas sí tienen que ver con su trabajo como secretario general del Suterh, como por ejemplo una visita que hizo el 28 de enero a las obras de la clínica y el hotel del Suterh en Mar del Plata, ciudad en la que aterrizó el helicóptero la noche del 27.
Aunque dos fuentes habían señalado que entre los viajes que hizo Santa María había hecho uso de la aeronave para viajar a un destino turístico en el sur del país, el gremialista negó aquella versión y dijo a este medio: “Yo no me tomo vacaciones”. Desde su entorno precisaron que solo lo utiliza “cuando no hay requerimiento sanitarios vigentes y exclusivamente para cuestiones laborales vinculadas con el gremio o el Grupo Octubre”.
El director titular y presidente de Bhrisa S.A es Leopoldo Sebastián Ornass, un piloto que trabajó para la policía bonaerense y que antiguamente se desempeñó como director de Operaciones Aéreas del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires durante el gobierno de Daniel Scioli.
En octubre de 2021, Bhrisa SA incluyó en su directorio a varios afiliados del Suterh. Designó a Pedro Orlando Zamorano como director suplente en diciembre de 2021. Zamorano integra la Comisión Directiva del Sindicato, donde se desempeña como Secretario de Formación Profesional y Educación. También fueron directoras de la firma Bhrisa S.A Marta del Valle Valdez, una afiliada del gremio que tiene 73 años, y Norma Mabel Base, quien también tuvo un cargo directivo en el Suterh y fue, además, directora de la firma Go Inversión y Administración, la empresa mediante la cual se compró el edificio en Conde y Dorrego, donde el Grupo Octubre planea construir un polo gastronómico. Todos estos cambios fueron certificados por el estudio AVOA Abogados, que tiene sus oficinas en la calle Corrientes y que entre sus clientes tiene al diario Página 12.
El sindicato conducido por Víctor Santa María adquirió en los últimos años una gran cantidad de empresas y muchas no tienen relación con la actividad gremial ni con el trabajo de sus afiliados.
En su rol de empresario de medios y a través del Grupo Octubre Santa María ya controla más de diez medios de comunicación. También se expandió en el rubro hotelero, y recientemente incursionó en el negocio de la publicidad en vía pública. Algunas de estas operaciones comerciales, y el abordaje que hace sobre algunos temas con los medios de comunicación del Grupo Octubre, le valieron más de un enojo de ministros y dirigentes cercanos al Presidente, según informó LA NACION.
El modus operandi del Suterh es similar al que emplean otros sindicatos: el gremio adquiere las acciones de una empresa, designa como autoridades a miembros de su Comisión Directiva y, en varios casos, las contratan para determinados servicios. “Todo es legal”, señalan cerca del gremialista, sin precisar el beneficio que estas operatorias traen para los afiliados del sindicato.