Salvo la aprobación de la autorización para renovar el endeudamiento con el FMI que el Senado convirtió en ley casi a la medianoche de ayer, nada de lo que sucedía en el país en materia política o económica tenía algún potencial de general calma o confianza. Mientras los senadores (con el Frente de Todos estallado en divisiones) avanzaban con la votación de ese proyecto, los ejecutivos de los supermercados mas grandes del país y algunos representantes de los locales mas chicos recibían nuevas listas de precios por parte de empresas lácteas y de productos de almacén con subas que superan el 10%.
La maniobra no sorprendió a nadie en el sector ya que es habitual que las empresas alimenticias lo hagan antes de la implementación de algún congelamiento o programa de precios cuidados. La historia se repitió sin cesar en los últimos años e indica que el paquete de medidas que anunciará hoy Alberto Fernández nace, una vez mas, con pocas chances de éxito.
Para casi todos los economistas consultados, el Gobierno no entiende el peligro que significa una inflación mensual constante, como el 4,7% de febrero, que aceleró el año a un acumulado ya de 8,8%. Entre la Casa Rosada y el ministerio de Economía se pulían anoche los últimos tramos de los anuncios que Alberto Fernández hará hoy en versión grabada o vivo, algo que aun no esta definido, pero no primaba el optimismo ni siquiera entre los colaboradores mas íntimos del presidente.
El paquete de medidas que hoy anunciará el jefe de Estado viene precedido, como ya adelantó MDZ, de algunos indicios que le quitan sorpresa y espectacularidad, si es que en algún momento alguien pensó que la podían tener. La portavoz presidencial, Gabriela Cerruti dio alguna pista cuando en la conferencia de ayer recordó que Roberto Feletti “está llevando adelante un excelente trabajo”, ya que “los alimentos que están en Precios Cuidados, sobre todo en supermercados, se han mantenido abajo del índice de inflación”.
Dos puntos a destacar: de las explicaciones de la portavoz: los controles congelamientos y listas de precios de Feletti parecen ser del agrado de Alberto Fernández y al mismo tiempo el Gobierno da señales de no querer ver que con esas políticas ya en marcha el país ingresó igual en la espiral inflacionaria mas fuerte de los últimos 30 años. Esta vez hay elementos que pueden hacerlo mas grave: la inflación de febrero y su impacto de 7,5% en alimentos se da sin que haya impactado todavía la última suba en el precio de los combustibles y el 20% de incremento en la tarifa de gas. Tampoco influyó en la inflación del mes pasado el impacto de la invasión Rusa a Ucrania, a pesar que el Gobierno la quiso usar para justificar las subas. Cuando empezó la guerra, el precio del trigo que se usaba para producir alimentos había sido fijado por contratos y entregas cerradas mucho antes de que a Vladimir Putin se le ocurriera avanzar con los ataques.
Entre las "novedades" dará a conocer hoy y que anoche aun se estaban analizando figuran el regreso de precios máximos, experiencia que el año pasado se termino levantando porque estaba destruyendo la producción, está fijar nuevos precios a la canasta de cortes de carne populares y ampliar precios cuidados. A todo ese paquete archiconocido el Gobierno le sumará una convocatoria a empresarios y sindicalistas para cerrar un pacto de precios y salarios, también probado en la historia del país y en algunos casos con finales catastróficos, y la posibilidad de insistir con la suba de retenciones a derivados de la soja. Junto con esa medida se avanza en pulir el funcionamiento del ya lanzado fideicomiso del trigo, destinado a subsidiar la producción de pan y fideos secos a menor precio y otro para intentar garantizar verduras frescas también a precios subsidiados.
Ayer se confirmó que esos anuncios se harán en la Casa Rosada y no en Tucumán, como se anunció al principio y que junto al Alberto Fernández estarán presentes Martín Guzmán, Julián Domínguez, por lo que se esperan medidas sobre el campo, Matías Kulfas y Feletti. Se calcula que los anuncios serán a partir de las 18.