Pasaron más de dos años desde que el nuevo coronavirus empezó a esparcirse por el mundo.
Hubo hospitales colapsados en todo le mundo. Cuarentenas. Más de 400 millones de personas contagiadas con una enfermedad hasta ahora desconocida y cerca de 6 millones de fallecidos.
También hubo desarrollos científicos que llegaron con una rapidez inesperada como tests y vacunas que sirvieron para minimizar el riesgo de contagio y las consecuencias de la enfermedad.
A casi dos años de declarada la pandemia, los investigadores siguen estudiando la enfermedad para entender mejor cómo se desarrolla el virus que frenó al mundo a principios del 2020.
Científicos de Gran Bretaña y Austria realizaron un estudio sobre más de 3.000 proteínas sanguíneas que fueron comparadas con las halladas en casos graves de covid.
El mismo mostró la relevancia de 11 proteínas: 6 de ellas con un vínculo causal en hospitalizaciones y 5 vinculadas a la necesidad de recibir asistencia respiratoria. Además, el estudio señaló que otras 17 proteínas tenían asociación causal con covid grave.
"Hemos utilizado un enfoque puramente genético para investigar un gran número de proteínas sanguíneas y hemos establecido que un puñado de ellas tiene vínculos causales con el desarrollo de la covid-19 grave. Centrarnos en este grupo es un primer paso fundamental para descubrir objetivos potencialmente valiosos para el desarrollo de nuevos tratamientos", declaró el doctor Alish Palmos, del King's College London y uno de los coordinadores del estudio que fue publicado en la revista especializada PLoS Genetics.
"Lo que hemos hecho es proporcionar una lista corta para la próxima etapa de investigación", explicó Gerome Breen, otro de los líderes de la investigación. En el comunicado, señaló que estos datos "presentan una vía potencialmente importante para futuras investigaciones para comprender mejor los mecanismos detrás de covid-19 con el objetivo final de desarrollar nuevos tratamientos, pero potencialmente también terapias preventivas".
El estudio hace especial énfasis en la proteína ABO, implicada en casos de covid grave. "Nuestro estudio no vincula el grupo sanguíneo preciso con el riesgo de covid grave, pero dado que investigaciones anteriores han encontrado que la proporción de personas del grupo A es mayor en las personas positivas para covid, esto sugiere que el grupo sanguíneo A es un candidato más probable para estudios de seguimiento", explicó el doctor Christopher Hübel, miembro del equipo de investigación.
El estudio buscaba encontrar a relación entre covid y proteínas sanguíneas buscando información que permita desarrollar fármacos para evitar o contrarrestar el efecto de covid grave. Según el profesor Vincent Millischer de la Universidad Médica de Viena y miembro del equipo que llevó a cabo la investigación, hay una estrecha relación entre “la exposición y la enfermedad puede establecerse porque las variantes genéticas heredadas de padres a hijos se asignan aleatoriamente en la concepción, de forma similar a como un ensayo controlado aleatorio asigna a las personas a grupos”.
Millischer detalló que en el estudio “los grupos se definen por su propensión genética a diferentes niveles de proteínas en sangre, lo que permite evaluar la dirección causal entre los niveles elevados de proteínas en sangre y la gravedad de covid, al tiempo que se evita la influencia de los efectos ambientales”.