Una mujer de 32 años quedó presa este fin de semana por estar sospechada de asesinar a su pareja utilizando un método de envenenamiento nunca antes detectado en Mendoza.
Fue en la Fiscalía de Homicidios de Claudia Ríos donde avanzaron en esa hipótesis luego de que un informe forense confirmara la causa de muerte de la víctima y descubrieran que la acusada, identificada como Karen Leylen Oviedo, adquirió días antes y a través de internet un producto anticongelante para vehículos automotores que le habría suministrado al hombre como si fuera un remedio.
Además, trascendió que los investigadores secuestraron el teléfono celular de Oviedo y supieron que había realizado días antes de la muerte búsquedas relacionadas con un accionar posiblemente delictivo: los peritos tecnológicos observaron que indagó en Google empleando frases como “cuál es el veneno más letal” y “cómo borrar el historial de búsqueda”.
A?los detectives no les cerraba la actitud que evidenciaba luego del fallecimiento de su pareja, Rolando Ángel Aquino (35), en una clínica privada, el martes 8 de este mes, ya que no se mostraba dolida. Un día antes, lo había internado porque el hombre estaba descompuesto y vomitaba a cada rato. Presentaba un preocupante estado de salud y creían que era por una enfermedad que padecía en la piel.
Lo cierto es que las versiones que dio Oviedo a la policía no fueron contundentes y comenzaron las sospechas de un posible envenenamiento en la casa-despensa que compartían en calle Manuel A. Saenz, de Villa Nueva, Guaymallén, por las contradicciones que presentaba al hablar sobre el remedio que le suministraba.
La fiscal de Homicidios inició un minucioso trabajo en la causa y sumó pruebas determinantes, tanto físicas como testimoniales, entre ellas, la de una empleada que aseguró que la sospechosa obligaba al hombre a ingerir una botella de medio litro del, hasta ese momento, misterioso producto. Es más, hasta describió que la víctima le decía a su mujer, palabras más palabras menos: “Todo lo que me estás dando me cae mal”.
Luego se supo que el producto contenía etilenglicol, el ingrediente primario de los anticongelantes para automóviles. Se trata de un químico incoloro, inodoro y con sabor dulce.
Esta descripción no fue menor para los sabuesos de Investigaciones, debido a que, se desprendió de la instrucción, la mujer le suministraba el líquido camuflado con jugo de naranja, a veces, con un gotero. Al no tener sabor, pasaba desapercibido y el estado de salud de Aquino comenzó a empeorar con el paso de los días hasta su fallecimiento.
Durante el fin de semana, Ríos ordenó la detención de Oviedo por homicidio agravado por el vínculo y por el inciso segundo del artículo 80 que versa sobre el que matare a otro “con veneno y otro procedimiento insidioso”.
De ser hallada culpable en un juicio por jurados, la única pena posible será la de prisión perpetua.
