Tras la suspensión por la pandemia, volvió a México su desfile por el Día de Muertos, famoso en todo el mundo. Así, volvieron a verse cráneos de colores, presumidas catrinas y simpáticos esqueletos venidos del más allá.
Esto se vio ayer domingo en la Ciudad de México, durante el gran desfile, que este año volvió con más fuerza que nunca tras haber sido suspendido en 2020 por el surgimiento del nuevo coronavirus.
Según las autoridades mexicanas, este ha sido el desfile más grande hasta la fecha, contando con diez carrozas alegóricas y un millar de participantes, como estrellas musicales y 350 bailarines y acróbatas.
Así, fueron miles los turistas que llegaron a la capital para disfrutar de las festividades que solían hacerse solo en las provincias.
Uno de los participantes, reveló a Euronews: "Fue a partir de esa película [Spectre] que se empezó a promover un poco más la mexicanidad, la tradición. Lamentablemente, antes no sucedía, al menos no a nivel global, era más local, más de provincia, de los estados. Ahora, con todo esto, se está difundiendo incluso a nivel global. Vemos muchos extranjeros que han venido y se lo están pasando bien".
Esta vez, el desfile se hizo en honor a los casi 300 000 mexicanos que fallecieron por culpa de la COVID-19. Los 288 000 muertos confirmados, casi 4 millones de casos detectados y tres olas de contagios vuelven a México el cuarto país del mundo con más número de decesos por la pandemia, superado solo por Estados Unidos, Brasil y la India.
"Esta ofrenda se hizo en memoria de mis dos hermanos, que fueron jugadores profesionales, uno del Cruz Azul y otro del Atlante, y de mi mamá. Mi mamá y mis dos hermanos fallecieron los tres en quince días", cuenta a la agencia Marcelo Romero frente al altar que construyó en el estacionamiento de su casa.