Según vos
Por Osvaldo Bazan
¡Qué clarito todo!
El ámbito, los protagonistas, el tono, el contenido, la difusión, los apoyos, la falsedad ideológica, el espanto.
¡Qué clarito todo!
Cientos de años después, si de esto que era un país sólo quedase la crónica de la Docente Desquiciada y el pibe de La Matanza, cualquiera medianamente avispado podría entender cómo era Argentina 2021.
Está todo ahí.
La ira del poder, los baladros de los mentecatos, la degradación de la academia, el curro de los sindicatos, el adoctrinamiento de los mediocres, la dignidad de los olvidados.
Alguien abusa de su autoridad circunstancial en una relación de las más asimétricas posibles. Y grita, increpa, sofrena a unos pibes que tienen la obligación de estar ahí y aguantar. Y que además, serán calificados por eso.
La Docente Desquiciada está tan convencida de su verdad que no se siente obligada a explicar ningún punto. Su nivel académico, lo que estudió en años de excelencia institucional le alcanza para gruñir: “¿Porque tiene ojitos celeste no te va a robá?”.
Después, abrevando más aún en lo más rancio del diálogo barriobajero, acude a un “¡dié luca pa’riba!, ¡dié luca pa’riba!”.
Está claro: ella es la profesora; la representación de la ciencia y la inteligencia que el Estado pone a disposición de los jóvenes.
Sin embargo, lo que ocurre en esa aula viral no es una clase, mucho menos un debate político.
Es clarito que es bullying en su acepción “acoso escolar” o “intimidación”.
El intento de apabullar es evidente.
El estudiante no tiene la posibilidad de desarrollar un argumento.
La Docente Desquiciada lo acorrala y no lo deja sumar más de veinte palabras seguidas.
Los gritos de Laura Radetich lo interrumpen con premisas científicas tales como “atacó el pueblo y se llevó la tarasca él y sujamigoj”.
No explica, no informa, no esclarece.
De verdad no es relevante lo que Radetich diga.
Sólo importa impedir que el estudiante desarrolle un pensamiento distinto al de la profesora.
Lo único que hay es una manera de discursear que Radetich aprende día a día viendo entrevistas de Victoria Tolosa Paz, Mayra Mendoza, Fernanda Vallejos, María Fernanda Raverta y todas esas Susanitas disfrazadas de Mafaldas, cortadas por la misma tijera de la soberbia y la prepotencia, que creen que porque hablan sin respirar encadenando sinsentido con sinsentido, tienen razón.
Creen que convencen y sólo apabullan.
Creen que dominan y sólo aburren.
Y también es clarita la reacción del estudiante.
No se acobarda ni se envalentona.
Hace lo que hace alguien que quiere saber.
Cuestiona.
Algo que sólo puede incomodar a quien supone que no hay nada que explicar y que quien pregunta lo hace para disputar su sabiduría.
El pibe pregunta.
Ante el poder, alguien pregunta.
No recibe un argumento, sólo una vocinglería vana, un basto repertorio de lugares comunes. “Yo hice una pregunta y me contestó con un libreto”, dijo el pibe unos días después.
El libreto peronista.
Tan clarito, tan metafórico que podría decirse que esa aula matancera es el país en chiquito, la misma desolación, el mismo desencuentro; la misma megalomanía vacía y pedante que azota la Argentina, en versión tiza y pizarrón.
Vos no valés nada por vos mismo.
Te vas a conformar con esto que te doy, que es una porquería, pero que es a lo único que podés aspirar, porque tu papá no tiene “de dié luca pa’riba, de dié luca pa’riba”. Tu papá, como vos, es nadie.
Si tu papá tuviera “de dié luca pa’riba” no tendrías que estar en este curso desgraciado, imbécil, con esta porquería que te da el estado. Así que, agarrá esta porquería, callate la boca y que nunca se te ocurra aspirar a más.
Clarito.
Ese es el poder.
Ese es su discurso.
Sos pobre.
Morirás pobre. La culpa la tienen los ricos que se la fugaron toda.
Lo poco que te merecés, te lo doy yo.
No te olvidés.
Y agradecé.
Pero cuando menos lo esperan, ante esa arrogancia que se autopercibe omnipotente, como un chino con una bolsa en la mano ante un tanque en una Tiananmen del tercer cordón del conurbano, un pibe sin despeinarse recurre a dos palabras que resignifican todo.
Una clase magistral que nos regala el pibe de La Matanza a todos los que aún tenemos esperanzas.
El pibe dice: “Según vos”.
Eso que la Desquiciada impone como verdad indiscutible, definitiva e irrefutable, es rebajada de un plumazo cuando el pibe le dice “según vos”.
Clarito.
No hace falta más.
El poder se derrumbó.
“Según vos” dice el pibe y frena con sólo ocho letras el intento de verdad absoluta de la Docente Desquiciada.
Desde el aula se deben impartir conocimientos.
Los conocimientos que hay hasta ahora.
La ciencia, lo supimos rotundamente este año, está todo el tiempo sujeta a correcciones.
Es duda es aventura, es enigma a descubrir.
Pero la Docente Desquiciada no lo acepta. Para ella, lo obvio es obvio y lo demás no existe. No hay nada que explicar. Hay una verdad ideológica que ya le fue revelada y en escatológica conclusión, grita “hay que salir de la mierda en que nos dejó Macri”.
Pero el pibe dijo “según vos”.
No hay autoridad que quede en pie cuando el ciudadano dice “según vos”. Es la confirmación de que se dejó de creer en la autoridad porque no está a la altura de la conversación.
¿Qué podría haber convertido ese sketch de Gasalla en un formidable debate sobre política en un colegio secundario?
Argumentos. Datos. Contextos. Un profesor que, sin gritar, expusiera varios puntos de vista, citara diversos autores, incitara a los alumnos a cuestionarlo y a cuestionarse. Sin dejar de lado la ideología.
Eso es un debate.
No que una Desquiciada insulte a troche y moche como si uno de Los Monos Cantero se hubiera puesto a dar clases.
Por eso es coartada mentirosa de progre pistola decir que “no estoy de acuerdo con los modos pero el contenido está bien”. Los modos clausuran el debate.
La pareja de Fabiola, desperdiciando una vez más como es su costumbre, la oportunidad de callarse la boca, dijo que “es evidente que el chico, a quien no veo, tiene una idea formada que es el resultado de escuchar cosas dichas, como por ejemplo: ‘El peronismo gobernó los últimos 70 años’. Y lo repite el chico. Ella se exalta porque sabe cómo es la verdad”.
Como siempre, lo que dijo el presidente es mentira.
El chico no dice eso, apenas llega a preguntar: “¿Y en 37 años que estuvo el peronismo no arruinó el país?”.
La Docente Desquiciada, sulfurada, aúlla: “¡NO! ¿Qué 37 años? ¿De qué estás hablando?”. Y le anuncia a los compañeros del pibe que, por ese comentario, “¡ya se llevó historia!” para terminar con un “El peronismo no estuvo 37 años”.
Según la pareja de Fabiola, la Docente Desquiciada se exalta porque sabe cómo es la verdad.
La verdad es que con los primeros 10 años de Perón, los segundos 3 de Cámpora/Perón/Isabel, los 10 de Menem, los 4 de Kirchner, los 8 de Cristina Kirchner y los 2 de Fernández, la suma da…37 años. A no ser que el pibe hablase de la patria chica, de La Matanza, en manos del PJ desde 1983. Ahí serían 38 años.
Clarito.
El poder peleándose con las cifras, con los datos, inventando un relato para su beneficio.
El chico tenía razón con lo de 37, diga la Docente Desquiciada lo que diga.
Pero hay más.
Ante la explosión del escándalo, rápidamente se informó que Laura Radetich había sido separada de su cargo “por una presunta falta aplicando el artículo 139 del estatuto docente”, como le aseguraron “fuentes oficiales” a la agencia NA.
Eso es, simplemente, falso.
Un dato para los giles.
Lo que de verdad ocurrió es que le dieron una licencia hasta que una “comisión investigadora” dispuesta por la Jefatura distrital de La Matanza diga aquí no ha pasado nada, que es lo que ocurrirá, según veremos a continuación.
Lo ratificó un personaje central en esta historia: el “Chino” Alejandro Schvartzman, Inspector de Educación Secundaria, ex Consejero escolar de La Matanza, vocal titular de SUTEBA Provincia, Congresal de CTERA, congresal del PJ Bs. As., pre candidato a Primer Consejero Escolar en La Matanza y creador de la ADPNCK que ya veremos, es algo más que un menjunje de letras.
El Chino en un wasap a sus compañeros de la ADPNCK les contó: “Nosotros estamos acompañando a Laura Radetich. La estamos cuidando y defendiendo. Hoy la acompañé a que le tomen declaración en una investigación simple, no está separada del cargo, están con lic. 114 M1. Fuimos bien tratados y contenidos. La info a Presidencia de la Nación Salió del Peronismo Matancero que banca a Laura!!”.
Nadie la separó de ningún cargo, como anunciaron.
¿Cómo está formada la “comisión investigadora”? Por tres inspectores: quien va por enseñanza inicial es de Suteba Celeste (como Radetich), quien va por enseñanza secundaria es militante K (como Radetich), quien va como psicóloga es amiga.
Los tres integrantes de la “comisión investigadora” son amigos y compañeros del “Chino” Schvartzman, que también anunció en su wasap “estuve con ella desde las 8 hs. Hasta recién porque se quedó en casa un par de horas!!”.
Sólo viendo la remera que usa el Chino cuando visita al intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, se puede anticipar el resultado de la investigación.
Cuando el chico y su papá fueron el viernes a declarar a la comisión, habría recibido la “sugerencia” de que no denuncie el caso. Le dijeron: “Si usted denuncia, la docente podría perder el trabajo”, a lo que el padre ante la intimidación -según mis fuentes (¡Siempre quise decir “según mis fuentes”! ¿Ya soy Nico Wiñaski?) habría respondido: “No es mi intención que lo pierda”.
Siendo así, sin denuncias y con “investigadores” amigos, será muy fácil que todo quede en el olvido.
Antes de fin de año, la Docente Desquiciada estará gritando a su antojo otra vez en el colegio. Ya anunció al sitio periodismoypunto.com que se siente reconfortada por el apoyo presidencial y que “después que esto se resuelva, creo que voy a escribir de mi puño y letra, todo”.
Difícil que el pibe no se lleve la materia.
Todo tan clarito.
Aparece entonces, con una redacción que no debería poder pasar un examen de Lengua de primer año, el comunicado de la ADPNCK La Matanza: “Con Radetich pasa lo mismo que ocurrió con Florencia Peña y la visita a Olivos. Todos los cañones sobre Peña, pero sobre Brandoni, nada, que hizo lo mismo que Peña. ¡Pero claro! Peña es mujer y peronista”.
Al comunicado le caben las palabras del pibe: “Según vos”.
Ahora bien, ¿qué es la ADPNK La Matanza?
Es la Agrupación Docente Peronista “Néstor Carlos Kirchner”, que se lanzó el 1º de junio del 2019 en el distrito de San Miguel. Según su página en internet: “En el marco de la Federación de Docentes Peronistas Néstor Carlos Kirchner. La agrupación surge en La Matanza, con apoyo de la intendenta Verónica Magario y de la mano del Cro. Docente, Alejandro “Chino” Schvartzman, Presidente del Consejo Escolar Matancero, con el ideario de juntar a los y las compañeras peronistas de su distrito. La iniciativa se comienza a propagar a otros distritos como Moreno San Martín, Pilar, Ituzaingó y llega a San Miguel. Estamos en pleno proceso de conformación y expansión creemos que es el mejor lugar donde la docencia peronista se puede desarrollar”.
¿Qué quiere decir todo ese palabrerío mal puntuado y qué tiene que ver con el adoctrinamiento?
La ADPKN no es una agrupación de docentes.
Es una agrupación de docentes peronistas.
Los une su amor por la docencia desde el peronismo.
Son los encargados de las discusiones formidables que abrirán cabezas. ¿Son respetuosos los de la APDNK de las diversas ideologías de sus alumnos? ¿Los incentivan a pensar por sí mismos? ¿Qué pasa cuando los pensamientos libres los contradicen? ¿Tienen la altura suficiente para argumentar y escuchar objeciones? ¿Toman alguna represalia si el alumno no coincide con lo que ellos piensan? ¿Gritan como la Docente Desquiciada sabiendo que sus colegas los protegen? ¿O sólo presentan una forma más amable pero no dejan de adoctrinar?
El único ejemplo de su accionar que tenemos hasta ahora es Laura Radetich, la Docente Desquiciada.
Cuando surge un problema, como ahora, los docentes son “controlados” por el cuerpo de inspección, como hemos visto, virtualmente tomado por el kirchnerismo, así como la jefatura distrital, la jefatura regional –algo así como los brazos del ministerio en territorio- las instancias ante las que la escuela rinde cuentas.
Estamos en presencia de un sistema que hace bullying a los alumnos y ampara a quienes, como la Docente Desquiciada, adoctrinan, todo bajo el manto acogedor de la ADPNCK.
Ante todo este aparato ideológico, del que forma parte la Escuela Nº 2 María Eva Duarte, del barrio Ciudad Evita, fue que se paró el pibe y dijo “Según vos”.
Y en el medio, claro, la pareja de Fabiola y su bocota.
Dicen quienes están cerca que sólo habló para tapar el desastre de ese delito de la fiestita de Olivos que cometió disfrazándolo de error.
Hace lo que aprendió como mediocre operador político, que eso es lo que vino haciendo hasta que la vice lo eligió: intentar tapar un escándalo con otro. Lo que no termina de entender -o mejor, una de las tantas cosas que no termina de entender- es que el fuego que inició no se apaga con un balde de nafta.
Ahora no sólo es el que no cumplió la orden que él mismo dio y se fue de joda en plena cuarentena. Es el que no cumplió la orden que él mismo dio, se fue de joda en plena cuarentena y además defiende a una desquiciada maleducada que grita en el aula. Se mandó un dos por uno.
Hemos aprendido algo del alumno de La Matanza.
Cuando Filomena Vizzotti dice: “Todos los argentinos cometimos errores”, se le contesta: “Según vos”.
Cuando el que parece ministro de Economía, Martín Guzmán, dice: “Nosotros somos el pueblo”, se le contesta: “Según vos”.
Cuando Sabina Frederic dice: “Los carpinchos son una manera en que la naturaleza devuelve el daño que le hacen”, se le contesta: según vos.
Cuando Cristina Fernández dice: “Las fallas de los gobiernos populares se magnifican para irritar e indignar”, se le contesta: según vos.
Y cuando la Docente Desquiciada dice: “¿Vos te pensás que el pueblo es boludo?”, se le contesta yendo a fiscalizar, cuidando las urnas y con el recuento de votos se le dice, de manera muy calma: “según vos”.