El año pasado se suspendieron en su mayoría. Este 2021 las exposiciones rurales de la zona se llevarán a cabo, pero con muchísimas limitaciones, y esperando que la reciente aparición de la variante delta de coronavirus no termine ocasionando una inesperada catarata de suspensiones por cuestiones directamente vinculadas a la sanidad y los protocolos.
Por el momento, en casi todos los casos, se limitarán exclusivamente a la parte ganadera: juras de grandes campeones bovinos y ovinos, y los posteriores remates, con presencia de expositores, cabañeros, compradores, allegados y prensa. Nadie más. En alguna localidad de la zona están pensando en sumar un paseo de artesanos y hasta público, pero todavía no hay nada determinado. En esta cuestión también tallarán muy fuerte las cuestiones vinculadas a los aforos y a las restricciones propias que se establezca desde el Estado; el año pasado, muchos municipios terminaron dando por tierra con las intenciones de las rurales de llevar a cabo la muestra.
Más allá de que Palermo nuevamente fue pospuesto hasta 2022, el tradicional circuito de exposiciones en la región se llevaría a cabo sin problemas. En orden, llegarán Coronel Dorrego, Viedma-Patagones, Saavedra, Coronel Pringles, Villa Bordeu (Bahía Blanca) y Coronel Suárez, todas ellas en forma acotada a la exposición y remate de animales, sin muestras comerciales ni industriales ni, se entiende, público en las instalaciones. A esto se sumará también la transmisión por internet de algunos de estos eventos, que ya se llevaron a cabo durante el año pasado, y con buena repercusión.
Por ello, y por segundo año consecutivo, el tradicional encuentro multitudinario entre el campo y la ciudad deberá esperar otros 12 meses para volver a realizarse. Esto también supone un golpe duro tanto para las entidades rurales como para las instituciones que normalmente participan de estas muestras facilitando determinados servicios, como patios de comidas, que no contarán nuevamente con el ingreso extra que obtienen en estos eventos.
Desde las entidades rurales, las expectativas son altas, y se espera que las cabañas respondan en tal sentido. Las ventas de reproductores en el último año -salvo Bahía Blanca- se limitaron a los remates privados, ya sean presenciales o por streaming. Se entiende que es necesario contar con un escenario público, para mostrar lo que se está produciendo, sobre todo después de dos años sin la vidriera que significa Palermo.
En Coronel Dorrego, por ejemplo, se contará con la presencia de varios establecimientos multipremiados en los últimos años, tanto a nivel local como nacional, que llegarán con animales de gran calidad para quedarse con el principal galardón en el pago chico. La categoría A para Angus de pedigree con que cuenta la muestra desde hace un par de años termina siendo, en ese sentido, un plus para presentarse.
En Coronel Suárez, la cita será entre el 7 y el 9 de octubre y, aunque ya está todo definido para la muestra ganadera, todavía existen expectativas respecto del ingreso de público y de la incorporación de la parte comercial e industrial.
"Necesitaremos autorización, pero podemos adaptar algunos sectores al aire libre", dijo el gerente de la Sociedad Rural, Roberto Olmedo.
